Un padre compartió desgarradoras imágenes de los últimos momentos con vida de su hija fallecida, como un intento por acabar con el bullying.

Adrian Derbyshire, de 42 años, tomó las imágenes minutos antes que su hija Julia, de 16 años fuera desconectada del respirador artificial.

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Adrian encontró a la adolescente agonizando en su casa, ubicada en la ciudad de Warrington, Inglaterra, luego que intentara colgarse debido al constante ‘bullying’ que sufría vía Internet.

El padre tomó estas fotos en octubre de 2015, pero recién ahora pudo volver a mirarlas. En tanto, su decisión de compartirlas en redes sociales configura un intento por elevar el perfil de una campaña anti-bullying que creó en honor a su hija fallecida, llamada ‘Apoyo contra la autolesión y el suicidio en la juventud’ (#SASSY, por sus siglas en inglés).

“Compartir estas fotos ha sido una de las cosas más difíciles que he tenido que hacer en mi vida. Las tomé minutos antes que Julia partiera y las dejé perdidas en mi teléfono porque no quería mirarlas. De hecho, aún nolo hago“, señaló Adrian al medio inglés Metro.co.uk.

No obstante, siempre supo que en algún momento podría necesitarlas para ayudar a crear conciencia sobre lo lejos que puede llegar el bullying y, en ese sentido, era vital utilizarlas, explicó.

Julia nació en Inglaterra pero cuando tenía cuatro años se mudaron a Estados Unidos, luego, una década más tarde volvieron a Inglaterra luego de que tuviera problemas con ciberacosadores y que autolesionara.

Adrian, quien está confinado a una silla de ruedas luego de sufrir un accidente cerebral en 2008, trató de incorporarla a una campaña que él mismo desarrolló para ayudar a niños y jóvenes a salir adelante a través del deporte, pero nunca le prestó atención.

Y es que la adolescente aún seguía siendo blanco de abusos en Internet y comenzó a usar una identidad falsa en diversos grupos web para promover el suicidio. Cuando su padre se dio cuenta, ya era demasiado tarde.

Es por eso que pese a lo difícil que ha sido mantener esas fotos, aseguró que si podían “ayudar a un padre o una familia a no pasar por lo que he pasado”, entonces su campaña tendrá el objetivo cumplido.