Cuando Alice Hall (20) creyó que estaba esperando un hijo su felicidad se llenó al máximo, sin embargo, jamás se imaginó el terrible vuelco que su historia daría.

Todo comenzó en junio del año pasado, cuando la joven británica sintió nauseas y mareos lo que la hizo pensar sobre un posible embarazo, siendo confirmado más tarde gracias a un test y una visita al doctor.

Lee también: Asombrosa recuperación de joven con cáncer a quien le dieron 5% de posibilidades de vivir

Sin embargo, la mala noticia llegó tras ocho semanas cuando Alice comenzó a desangrarse por sus partes íntimas, siendo enviada de urgencia al hospital más cercano.

Lo primero que me dijeron los médicos era que tuve un aborto espontáneo, pero el test de embarazo seguía confirmando que estaba esperando a un hijo porque mi útero pensaba que tenía un bebé ahí, eso explicaba que mi cuerpo sintiera ese tipo de síntomas“, dijo la joven a The Sun.

Tras estabilizarla, la chica fue enviada a su casa, pero unos días después debió volver al hospital, pues los intensos dolores habían comenzado una vez más.

Los médicos no tenían claro qué era, hasta que después de varios exámenes finalmente descubrieron que se trataba de un tumor en el útero y lo peor de todo, fue que un día la joven se despertó con un intenso dolor y contracciones como si fuera a dar a luz.

Sin embargo, efectivamente dio a luz, pero al tumor que la estuvo atormentando los últimos meses. “Después de 30 horas salió el tumor en el baño. Fue una de las experiencias más traumáticas que he vivido”, finalizó.

Cabe señalar, que Alice se encuentra siguiendo un tratamiento para mejorarse de las secuelas que esta terrible enfermedad le dejó.