Navidad es una época del año donde la caridad, el amor y paz debiesen reinar, sin embargo, por más significativa que esta fecha resulte, especialmente para los cristianos, lamentablemente no está libre de sucesos realmente escalofriantes.

La pasada Navidad en Chile, nos enteramos de un horrendo femicidio en Talca. Luis Eugenio Núñez Saavedra golpeó salvajemente a su mujer, de 53 años, para luego estrangularla hasta la muerte. Hace apenas unos días, según consigno El Centro de Talca, el asesino fue sentenciado a presidio perpetuo simple, lo que significa que no podrá salir más de prisión y que sólo en 20 años podría solicitar algún beneficio.

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Pero si hay un caso que quedará grabado por mucho tiempo en la mente es uno ocurrido en Estados Unidos, precisamente en la ciudad de Grapevine en Texas, una localidad que el 25 de diciembre de 2011 no se tiñó del rojo navideño, sino que del de la sangre.

6 personas de una tranquila familia fueron asesinadas por un hombre vestido de Santa Claus, en una horroroso ataque armado conocido como la Masacre Navideña de Texas.

| Dulce Navidad

Había sido una Nochebuena muy especial para las familias Yazdanpanah y Zarei. Habían celebrado una gran fiesta, con una deliciosa cena, y compartido con los parientes y amigos hasta altas horas de la noche.

La mañana siguiente, como es costumbre en Estados Unidos, todos se habían levantado temprano para abrir sus regalos y seguir compartiendo en familia.

Pero poco después de terminar de abrir los regalos, una visita inesperada tocó a la puerta… En ese entonces comenzó la tragedia.

Quien estaba afuera era Aziz Yazdanpanah, el padre de la familia, que se había separado de su mujer algunos meses antes y había sido excluido de las celebraciones navideñas.

| Santa Claus Asesino

Aziz, oriundo de Irán, llegó al departamento en el que vivía su mujer Nasrin Rahmaty, de 55 años, tras la separación. Sus hijos, Nona Yazdanpanah, de 19, y Ali, de apenas 15 años, se habían quedado con su madre.

En el lugar también estaban la hermana de su esposa, Zohreh Rahmaty, de 58, acompañada de su esposo, Hossein Zarei de 59, y su hija de 22 años, Sahra.

Vestido de Santa Claus, Yazdanpanah ingresó al hogar. A su hija no le pareció muy divertido y envió un sarcástico mensaje de texto a su novio sobre la visita de Aziz.

“Genial, supongo que está tratando de convertirse en el papá del año”, escribió la muchacha. Según informó días después la cadena NBC, 18 minutos más tarde una llamada al 911, hecha por el propio hombre disfrazado, encendió las alarmas.

Operadora (911): “911 de Grapevine ¿dónde es su emergencia?”
911: “Hola, 911 de Grapevine.”
Yazdanpanah: “Ayuda. Ayuda.”
911: “¿Necesita ayuda?
Yazdanpanah: (susurrando) “Un tiroteo”
911: “¿Se siente mal?
Yazdanpanah: (susurrando) “Disparando a gente”
911: “¿Cómo dice?”
Llamador: (Respirando)
911 : “Necesita una ambulancia o a la policía?
Yazdanpanah: (Respirando)
911: “¿Aló?”
Yazdanpanah: (Respirando)
911: “Un momento”
911: (hablando con otras personas) ” Tengo a una persona respirando muy fuerte en el teléfono… (la llamada se corta)

Efectivamente, poco después de entrar a la casa el padre de Nona y Ali comenzó a disparar sin tregua, terminando con la vida de todos los miembros de su familia. Después de llamar, se suicidó en la escena del crimen.

| Los motivos

Fue un crimen que conmocionó a la pequeña localidad de Grapevine, conocida por sus buenos vinos y precisamente por la gran cantidad de eventos navideños que celebran. Tanto, que es considerada la capital de la Navidad en Texas.

Pasados varios años los reales motivos son aún imposibles de conocer. El asesino no dejó cartas ni nada, pero los hechos ocurridos previamente dan cuenta de las posibles razones que tuvo para asesinar a su familia.

Según consignó en su momento el medio nacional CBS, Aziz Yazdanpanah llevaba más de una década desempleado aunque se declaraba trabajador independiente. Poco antes de la masacre, había solicitado la quiebra.

Su mujer, al contrario, era exitosa y fue quien sostuvo económicamente a su familia, a pesar de que su marido le había prohibido en varias ocasiones trabajar.

Esto fue parte de la crisis matrimonial que desembocó en la separación. Y, para peor, Aziz siguió enfrentando las deudas y la cesantía, ya que le negaron la deuda.

Envidia y desesperación lo habrían llevado a cometer este horrendo homicidio masivo. Poco antes de quitarse la vida incluso trató de inculpar a su cuñado, poniendo un arma en las manos de su cuerpo inerte.

Las investigaciones comprobaron que nunca disparó y que todas las percusiones fueron ejecutadas por Yazdanpanah, el autor suicida de la Masacre Navideña de Texas, el crimen más espantoso en la historia de la pequeña localidad de Grapevine.