Con tan sólo dos años la pequeña Ameliya Pellett, de Canadá, sufrió una parálisis desde el cuello para abajo después de enfrentar un resfriado común, que terminó como una pesadilla para ella y su familia.
Todo sucedió al siguiente de que Ameliya y su madre Miranda fueran a jugar al parque y a disfrutar del sol. Ahí comenzaron los extraños síntomas.
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De acuerdo a The Mirror, primero la pequeña perdió la sensibilidad en su pierna derecha, y los próximos días la parálisis se expandió a su pierna izquierda, brazos y cuello.
Su madre la llevó de urgencia al hospital de Ottawa, Canadá donde fue diagnosticada con el Síndrome de Guillain-Barré, el cual es un rara condición que consiste en la inflamación de nervios que ocasiona debilidad muscular o parálisis, debido a que el sistema inmunitario ataca parte del sistema nervioso por error, según Medline Plus.
Los médicos dijeron que el tratamiento para ella puede ser de por vida y que no hay respuesta definida de cuánto puede durar la parálisis.
“En un principio pensé que se trataba de una simple inflamación, por lo que le puse un poco de hielo creyendo que así podría mejorarse. Pero no, su condición empezó a empeorar mientras jugaba con su hermana pequeña, quedando incapacitada de moverse y con su cabeza balanceándose como una muñeca“, comentó su madre al diario británico.
Cabe señalar, que actualmente la pequeña se encuentra en un intenso tratamiento para pacientes que sufren deficiencia inmune en su cuerpo y con intensos procedimientos junto a un físico terapeuta para estar muy pronto cien por ciento recuperada.
