Una madre primeriza ha escrito un increíblemente honesto post para otras mujeres que pronto se convertirán en madres, destacando todas las cosas que pueden ser un tanto preocupantes poco después de dar a luz.

La bloguera, quien escribe bajo el nombre de Mummy Shambles, ha enumerado en una publicación de Facebook las 20 cosas que las madres deben saber luego de tener un bebé, poniendo de relieve los dolores posteriores, incluyendo aquel dolor que se siente cuando vuelves a hacer tus necesidades.

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Ella también quiso dejar en claro que tu bebé no lucirá como un modelo cuando apenas nace, y que es totalmente aceptable que pienses que tu bebé luce como “un abuelo sin cabello y ligeramente púrpura”.

Mummy Shambles está convencida de que su “primera caca en realidad no es caca” y que en verdad se trata de alquitrán. ¿Y tu primera ducha? Ni siquiera ha empezado.

“Tu primera ducha será como una escena de Carrie. Es normal, Sentirás como si nunca volverás a estar bien y que caminarás como John Wayne por siempre, pero lo cierto es que te sentirás mucho mejor en la ducha. Estás, literalmente, limpiando tus pecados“, indica.

Graciosamente, la madre bloguera nota que la palabra “succionar” se convertirá en parte de su vocabulario, y mientras estás ocupada sintiéndote como una vaca, tu lindo y adorable recién nacido, estará tirándose gases y experimentado sus primeros hipos.

“Hacen ruidos extraños mientras duermen y que te hacen pensar que vas a despertar y vas a ver a Chucky en la cuna, girando la cabeza y riendo“, detalla, agregando: “Uno espera que la gente sepa que es el bebé y no una. Aunque no necesariamente te das cuenta cuando te tiras un gas, puesto que tu control del músculo del esfínter, es un poco deficiente en ese entonces“.

De acuerdo a la bloguera, las madres primerizas pueden sentirse como toda una celebridad mientras están en el hospital, con el hecho de que “todo el mundo quiere verte”, así que disfrute de esa atención mientras puedas, antes que te sientas ‘demasiado cansada como para salir de la casa y ver a alguien'”.

También quiso dejar en claro que las emociones estarán corriendo a mil por hora luego de dar a luz: “Todo está mal“, dice. “Tu cerebro está enojado, tus ojos están irritados, tu estómago, tu vejiga, tu trasero. Tu vagina no está molesta, está jodidamente furiosa. Dale un rato para que se calme, porque en ese momento, tú y ella no son amigas“.

Pero a pesar de todo, a pesar de su “temible” publicación, la escritora quiere que todas las mujeres que se están preparando para dar a luz dejen de preocuparse.

“No eres una súper mujer. No hay tal cosa que sea normal como tampoco hay algo perfecto. Tu estás siendo normal con tu bebé, tu bebé está perfecto, nadie te está juzgando. Ellos dependen completamente de ti, y ser responsable con otro humano no es precisamente fácil y casi siempre viene acompañado de un ‘Oh Dios, no puedo hacerlo’. Tú puedes. Y cada día será más fácil, solo respira, mami“.