Una madre reveló su profundo dolor al enviudar a sus cortos 27 años, muy poco tiempo después de dar a luz a su octavo piso.
Cloe Green, de Gales del Norte, aseguró que intentó salvar desesperadamente la vida de su esposo, James, sin embargo, murió a la edad de 31 años.
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Cloe, quien conoció a su novio cuando eran unos adolescentes, señaló al medio inglés Daily Mail, su dolor por el hecho de haber quedado sola al cuidado de sus hijos, y su desilusión por no haber conseguido nunca una foto familiar.
La mujer reveló que apenas 12 semanas después de haber dado a luz a su hijo más pequeño, Elijah, su mundo cambió en 180 grados. “Fue tan repentino y tan chocante. Pensar que no estará para ver a su gran familia crecer, rompe mi corazón“, indicó.
Cloe aseguró que en el momento quería solo llorar, pero que luego de ver las caras de sus ocho hijos, quienes dependen exclusivamente de ella, sabía que debía ponerse de pie por ellos y por James.
Por lo mismo, actualmente Cloe creó una iniciativa para reunir cerca de 8 millones de pesos para finalizar el jardín que James nunca tuvo la oportunidad de terminar. No obstante, cree que lo más difícil que se le viene es decirles a sus hijos Leo (9), Levi (6), Oliver (5), Megan (4), Miley (3), Lacey (2) Lexi (20 meses) y Elijah (11 meses), que su papá se fue al cielo.
La pareja comenzó a tener hijos desde que Cloe tenía 17 años, y así fueron sucesivamente sin preocuparse del número, pues el difunto quería tener todos los hijos posibles. De hecho, solo decidieron parar cuando nació Miley, quien vino al mundo con “necesidades especiales”.
La madre de cinco, le pidió a su médico anticonceptivos, sin embargo, no hicieron efecto y volvió a quedar embarazada. “En ese momento James dijo que estábamos destinados a tener más bebés“, comentó.
Cabe señalar que la pareja tuvo tres hijas con parálisis cerebral.
“El súper papá James nunca paró. Corría a la escuela, iba a trabajar al café antes de recoger a los niños. Luego se sentaba y jugaba con ellos y hasta les leía cuando era hora de dormir. Tenía mucha energía“, agregó la viuda.
Cuando Elijah cumplió 12 semanas, James decidió llevar a los niños mayores a un paseo por Londres, pero la noche anterior todo cambiaría.
La pareja se fue a dormir como siempre, sin embargo, horas más tarde James se sentó de golpe en la cama y dejó de respirar. Cloe llamó a los servicios de emergencia, intentando mantener la calma. Tanto así que incluso practicó Reanimación Cardiopulmonar (RCP) antes que llegaran los paramédicos, pero James ya había fallecido por una falla al corazón producto de su hipertensión.
“Sentí mis piernas muy débiles y las lágrimas corriendo por mi cara. Decirle a los niños que su papá había muerto fue la cosa más difícil que he intentado hacer. Al final una hermana les explicó que su padre se había ido al cielo para estar con el abuelo. Los (hijos) mayores comenzaron a llorar“, reveló.
Tras la tragedia, la familia y algunos amigos han ayudado a Cloe con la escuela, y su madre le presta una mano en el cuidado de los pequeños en casa.
Cloe dijo: “Transformarme en la única madre de ocho hijos a una edad tan joven, cuando algunos de mis amigos aún están de fiesta y ni siquiera piensan en establecerse, es desalentador“, sinceró.
Por último, la mujer afirmó que uno de sus momentos más oscuros de su vida era cuando pensaba cómo iba a hacerlo sin James, pero que con el paso del tiempo ha ido enfrentando su pérdida valientemente y está segura que saldrá adelante. “Sé que puedo hacerlo, estoy sobreviviendo con el apoyo de mi familia y de beneficios que nunca antes necesité“, remató.
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