Rachel Lenhardt, una madre de 5 hijos, de 36 años, residente de Georgia, Estados Unidos, permitió que una de sus niñas, de 16 años, hiciera una fiesta en su casa con sus amigos y compañeros, a la que ella se sumó, pero el resultado fue nefasto.
Lenhardt, profesora mormona, terminó realizando una serie de cuestionables actos sexuales frente a la mirada de los adolescentes y permitiendo que menores de también se comportaran de manera inadecuada.
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La maestra de Sunday School, una institución educacional cristiana muy masiva en países de habla inglesa, se divirtió con el tradicional juego de flexibilidad “Twister” desnuda junto a su hija y sus pequeñas amigas y luego usó juguetes sexuales frente a ellas.
Además dejó a las adolescentes, de 16 años, beber alcohol y fumar marihuana en una fiesta al borde de la perversión, se escuchó en la corte según señaló Daily Mirror.
Como si fuera poco, la policía además informó que la mujer fue señalada además por tener sexo con un joven en el baño de la propiedad.
Fue luego del acto con el hombre, de 18 años, cuando usó los juguetes frente a las menores tras decirles: “aún estoy caliente”.
La mujer, que fue profesora de una iglesia mormona, finalmente no irá a prisión, pero fue condenada a 12 meses de libertad condicional y una multa de 100 dólares (66 mil pesos aproximadamente) por cada uno de los seis cargos que enfrenta en relación al delito de favorecer conducta ilegal, delictual e inapropiada de menores de edad, por lo que estará al menos 6 años en libertad condicional y deberá pagar un total de 600 dólares (395 mil pesos aprox).
Pero esto no fue lo único, pues Lenhardt perdió la custodia de sus cinco hijos – de los cuales cuatro no estaban en la propiedad en el momento de la fiesta y fue su ex marido quien informó a las autoridades.
Su alcoholismo se habría desarrollado precisamente luego de separarse de su esposo, quien fue enviado a combatir para el ejército en Iraq, pero a su regreso la relación no prosperó.
“La señora Lehnardt reconoce que, debido al abuso de alcohol reciente, se involucró en varios actos de conducta inapropiada. Ella está muy arrepentida por haber permitido que ocurriera este tipo de situaciones en su presencia y buscará ayuda profesional y pastoral para asegurar que esta conducta nunca se repita”, señaló su abogado Shawn Hammond, según consignó Mirror.
Su hija, que estuvo presente en la polémica fiesta también la defendió:
“Sí, arrestaron a mi mamá. Sí, cometió algunos errores. Sí, es alcohólica. Sí yo también la cagué. Pero nadie merece esta mierda. Así que paren”, escribió la adolescente en Twitter.
“Ella tiene la esperanza de que sus hijos, miembros de su fe y otros aprenderán de su mal ejemplo, sobre lo fácil que es para las personas ejercer juicios extremadamente pobre en estado de embriaguez”, agregó el jurista defensor sobre su cliente. Al mismo tiempo que el oficial de policía de Atlanta, Georgia, Estados Unidos, Steve Morris señaló que “cada vez que pensamos que hemos visto o escuchado todo, nos damos cuenta de que no es así”.
