Una mujer que vivió con obesidad durante varios años, quiso callar a los odiosos con un valiente acto, antes de someterse a una cirugía que terminaría de cambiar su vida para siempre
Stephanie Seabrook tiene 28 años y durante una época llegó a pesar 154 kilos, situación que la sumió en una depresión, producto de las constantes burlas de su entorno. Así, se convirtió en una joven “apagada”, sin vida social y que solo se limitaba a ir al colegio y permanecer en casa.
Lee también: Esposos chinos nunca han podido tener sexo por su obesidad: Pesan 400 kilos juntos
“Pensé que moriría siendo obesa, no podía hacer nada al respecto y me encerré en mi misma, alejando de todo el mundo“, señaló la joven, según consigna el medio inglés The Sun.
Stephanie comenzó a ganar peso producto del divorcio de sus padres, pues su forma de enfrentar la crisis y el estrés familiar, fue comiendo.
Luego de años de sentir lástima por sí misma e innumerables noches de llorar desconsoladamente hasta quedarse dormida, la joven decidió hacer algo al respecto: “Un día me cansé de todo y salí a dar un paseo, y caminé hasta que no podía más. Terminé recorriendo cerca de 6 kilómetros“, confiesa, agregando: “Seguí haciéndolo cada noche y perdí 9 kilos en una semana, sin cambiar nada de mi dieta. Me di cuenta que podía hacerlo“.
Stephanie, oriunda de Oregon, Estados Unidos, perdió casi 40 kilos en solos seis meses caminando, y luego decidió someterse a una cirugía que le retiraría todo el exceso de piel. El último acto de su transformación total.
Pero antes de ir pabellón, Stephanie tuvo una valiente idea para despedirse de su gris pasado. “Escribí todas las cosas que me dije a mí misma y que otros me dijeron, todas las palabras negativas, y al día siguiente fui a la cirugía“.
“La idea era dejar toda la negatividad en mi piel sobrante, así me sentiría mucho mejor al despertar“.
Han pasado tres años desde esa cirugía y Stephanie se ha convertido en una entrenadora personal, documentando su transición a través de su cuenta de Instagram.
“Me convertí en una entrenadora personal porque no creo que la mayoría de las personas entiendan realmente lo que es ser obesa. Ahora, me siento bien por primera vez, tengo mayor confianza en mi misma y estoy en paz con la persona que habita en mi cabeza“, remata.
