Nuestros teléfonos inteligentes nos acompañan a todas partes: en los conciertos de tu banda favorita, cuando sales a trabajar y hasta en el nacimiento de un nuevo integrante de la familia. Pero aunque tienen la particularidad de capturar los momentos mágicos de nuestra vida… también podrían arruinar estos.

Así lo afirma el fotógrafo australiano de bodas, Thomas Stewart, quien decidió probar su punto con una simple imagen. “Miren esta foto. El novio tiene que asomarse por el pasillo para ver a su novia acercándose. ¿Por qué? Porque su invitados están en medio del pasillo con sus teléfonos”, escribió en Facebook.

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“Esto apesta, pero no culpo a estos invitados en particular. Tengo una gran responsabilidad por lo que ocurre. Debería haber sido más específico con mis clientes al explicar por qué los invitados no deberían tomar fotos”, agregó.

Thomas Stewart | Facebook
Thomas Stewart | Facebook

El cabreado fotógrafo hizo un llamado a “no permitir que los invitados lleven sus teléfonos, tablets y cámaras, porque se meterán en el camino del fotógrafo. No tienen idea sobre cómo quitarse. Volverán tus fotos peor”, desperdiciando el dinero de los novios.

Además, “se meterán en tu propio camino”, agregó en referencia a los mismos recién casados. “Te perderás momentos de tu propia boda, porque hay un tablet en el camino. Extrañarás ver la cara de tu pareja en el pasillo”.

Thomas Stewart | Facebook
Thomas Stewart | Facebook

Además, “las fotos de estos invitados usualmente son una mierda” y cuando los novios quieran mirar a sus seres queridos para compartir el momento “¿qué verás? Nada de rostros, ¡están todos escondidos tras teléfonos y cámaras!”, puntualizó, haciendo un llamado a celebrar bodas “sin tecnología”.

“Seres queridos, ustedes han sido invitados a una boda para compartir y celebrar el amor que dos personas sienten por la otra. No los invitaron para tomar fotos que probablemente no verán. Los quieren ahí con su corazón y alma, con sus ojos llenos de lágrimas, para así formar parte de la ceremonia”, fue su gran lección.