Conoce a Erin Oliver: Esta inglesa de 15 años sufre una depresión severa, enfermedad que la llevó a intentar quitarse la vida por tercera vez saltando de un puente en la ciudad de New Hartley (Northumberland, Reino Unido). Por suerte, dos mujeres y un hombre se dieron cuenta de la situación y lograron hablar con ella hasta convencerla de lo contrario.
“El pasado lunes, estaba en la ciudad con mis amigos, pero comencé a sentirme mal. Mi ánimo se derrumbó y los dejé y caminé hacia el puente. Me paré en una orilla y quería saltar”, relató al medio inglés Metro. Fue en ese momento que un hombre bajó de su auto y se le unieron dos mujeres que caminaban por el lugar.
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En medio de la confusión, Erin puede recordar el nombre de sólo una de las mujeres: Sonia, a quien busca desesperadamente para darle las gracias. “Ella tenía la edad de mi madre y me dijo que existían otras opciones, que no tenía que terminar con mi vida. Ella trabaja en la Universidad de Newcastle y era realmente amable”.
También, la adolescente recuerda “a una mujer policía llamada Amanda, ella era genial también. Existe una razón por la que estoy aquí ahora y sólo quería darle las gracias a todos por salvar mi vida”. Tras ser bajada del puente, la chica fue llevada el Hospital General del Norte de Tyneside y ahora, espera una cama en la unidad de salud mental de Middlesbrough.
Los médicos creen que Erin tiene un desorden obsesivo compulsivo; además, el pasado año fue dianosticada de autismo. El medio también detalla que ella escucha voces que la invitan a quitarse la vida. Es por esto que recibe todo el apoyo de sus pades Suzanne (39) y Rob (42), de su hermana menor y la mascota de la familia, Tilly, un labrador negro. La chica decidió compartir su historia para despertar conciencia sobre la salud mental y porque espera que su historia pueda ayudar a los demás.
