Una ocupada madre se volvió adicta a las bebidas energéticas para balancear su ajetreada vida profesional con sus compromisos familiares, llegando a gastar más de 97 mil pesos en “Redbull”.

Cerca de 24 latas era la dosis diaria que ingería Sarah Weatherill de 31 años para sobrellevar la rutina en la que estaba inmersa. La cafeína se convirtió en su mejor aliada para cumplir con todos compromisos, sin embargo, no dimensionaba el daño que se estaba provocando.

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La trabajadora legal llegó a su punto más álgido durante el 2010 cuando se encontraba en la universidad y se preparaba por los exámenes, gastando cerca de 5 millones de pesos chilenos al año en su vicio.

Incluso llegó al punto en que no podía levantarse de la cama sin beber una lata, consigna el medio inglés The Mirror, y fue precisamente esa situación la que motivó su búsqueda de ayuda.

Visitó a una hipnoterapeuta, David Kilmurry, quien la convenció de que con una sesión de 50 minutos podía erradicar para siempre su mal hábito, eso sí, tuvo que reducir a 8 la dosis de “Redbull”, pues con tanta cafeína podría haber sufrido una convulsión durante el proceso.

Luego de la sesión, Sarah se curó completamente de su adicción. “Yo sabía que esto ya era una dependencia total, por lo que quise darle la oportunidad a la hipnoterapia“, señala, agregando: “Fue un proceso extraño, sentí como si hubiese estado sólo 15 minutos allí pero en realidad fueron 50“.

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La mujer, que vive con su novio Phil Evans de 27 años, y sus cuatro niños de entre tres y 14 años, comenta que su único recuerdo de la sesión es el de un efecto de caleidoscopio y que escuchaba una voz que decía que no necesitaba Redbull.

Era como una parálisis porque sentía picazón pero no podía moverme para rascarme (…) Me dio mucha fuerza ya que en el pasado intenté dejarlo pero sólo me duró una semana y luego volví a su consumo, en cambio ahora estoy convencida de que no beberé otra lata. Me siento una persona diferente“, remata.

Por último, Kilmurry señala que la adicción de Sarah era “muy grave”. “La cantidad de cafeína, taurina y aspartamo podía provocar convulsiones por eso le pedí que redujera su dosis antes de venir a mí“, indica.

Cabe señalar que alguna de los efectos secundarios que puede traer el consumo excesivo de esta bebida, según David, pueden ser “insomnio, depresión, ansiedad, palpitaciones y enfermedades cardíacas