Una mujer admitió haber asesinado a su marido, con el que tuvo una relación de 21 años, poniendo en secreto porciones de anticongelante en sus inyecciones de esteroides.
Jamie Baker, de 47 años, inicialmente negó las acusaciones en relación al homicidio de su marido James D Baker II, destacado competidor de levantamiento de pesas de 42 años, luego de que él colapsara en su habitación el 16 de septiembre de 2013.
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Sin embargo, la investigación de las policías finalmente dejó su crudo plan al descubierto. James había sido asesinado lentamente con Etilenglicol, una sustancia que se encuentra en el anticongelante de autos y este lunes finalmente la mujer debió confesar la verdad.
Según informó Delaware Online, la autopsia del cuerpo de Baker demostró que tenía pequeñas dosis de la sustancia dentro de sus riñones y que una vez que se cristalizaron dentro de sus órganos causaron la dolorosa muerte.
Las botellas de esteroides que James usaba para sus competencias y que fueron encontradas en la escena del crimen, contenían el ‘veneno’, sin embargo cómo había llegado el Etilenglicol ahí era el verdadero misterio, considerando que el amigo que le vendía los estimulantes a través de internet aseguró, bajo juramento, que no habían sido manipuladas luego de la recepción.
Fue sólo después de más de un año de investigación cuando Jamie confesó que había usado una aguja hipodérmica para poder infiltrar las botellas con un anticongelante que encontró en su garaje. Sin sospechar nada James, padre de dos hijas, se inyectó los esteroides que le causarían finalmente la muerte.
Jamie fue formalizada por homicidio en primer grado y arriesga una condena de al menos 15 años de cárcel.
