Dos dramáticos casos han conmocionado a Argentina en los últimos días. Por un lado, la muerte de Brian, un pequeño de 14 años, asesinado por motochorros en una escena de pesadilla. Y por otro, el de la familia de Romina Dusso, de 20 años, víctimas de un cuádruple asesinato perpetrado por el ex de la muchacha, Marco Feruglio.

En Santa Fe, el joven de 25 años cometió uno de los asesinatos múltiples más brutales de los que se tenga registro en el último tiempo al otro lado de la cordillera y los detalles son espeluznantes.

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El viernes, un día antes de los homicidios salvajes cometidos en la víspera de Noche Buena, Romina había interpuesto una denuncia por violencia en contra del asesino.

“Se produjo un incidente, cuando el autor del hecho se apersona en el lugar donde vivía su ex pareja y le hace entrega de un dinero para la manutención de sus hijos. Allí el hombre la golpeó”, comentó a los medios locales el fiscal Jorge Nessier.

Al parecer, tras el quiebre, el gran problema entre Marco y Romina era el dinero, la manutención de los 3 pequeños hijos que tienen en común, un varón de cuatro años y mellizas de un año medio.

Esa fue la discusión que llevó a la agresión y a la denuncia que interpuso Romina, quien además decidió irse de la casa de su madre, en el sector de Sauce Viejo, para ir al departamento de su padre, donde creía que estaría más segura. Sin embargo, Feruglio pronto desataría el terror. La última denuncia, ni otra serie de acusaciones policiales previamente interpuesta por la muchacha, no sirvió de nada.

Los asesinatos

En horas de la madrugada, según reveló el fiscal Nessier, el joven se dirigió a la casa de la madre de Romina.

Marco entró en la casa y asesinó brutalmente con un puñal a su exsuegra, Claudia Oliva de 44 años y a la actual pareja de la mujer, Nicolás Strubia de 39. Ningún vecino vio ni escuchó nada, consignó Clarín.

Algo muy distinto a lo que ocurrió un par de horas más tarde, cuando a eso de las 6 de la mañana el joven se fue hasta al centro de Santa Fe e ingreso, por medios que son aún investigados, al edificio de su exsuegro, Gustavo Dusso, de 45 años. Esperó a que saliera a trabajar y tras una breve discusión que llegó a los golpes, le dio varias puñaladas que le quitaron la vida.

Luego ingresó al departamento y le quitó la vida a Camila, su excuñada, de apenas 15 años. La pareja actual de Gustavo, María Noelia Huss, de 44, y la propia Romina también fueron apuñaladas en medio de la violenta locura de Marco, pero salieron con vida y fueron internadas en el Hospital José María Cullen.

En este último ataque, la desesperación y los gritos se apoderaron del lugar, alertando a los vecinos y permitiendo la pronta captura del homicida.

Terribles antecedentes

Apenas se realizó la detención de Marco, la fiscalía ordenó los peritajes psicológicos y psiquiátricos lo más pronto posible, para poder determinar su estado en el momento de los ataques, aunque los investigadores parecen tener claro que “la premeditación de los hechos expone un alto grado de lucidez para cometer los asesinatos”.

Su propia madre, Marcela Asencio, quien en una extensa carta pública pidió pena de muerte para su hijo.

“Mi hijo, más allá de su locura o carga psicológica, como quieran llamarlo, pobrecito, se merece como ustedes dicen la ¡pena de muerte! Por eso les pido y digo a todos los que se involucran sin saber, que dejen de hacerlo porque hay mucha gente sufriendo y sólo hacen que el dolor se agrande incitando a la violencia”, afirmó la madre del acusado.

Quédense tranquilos que mi hijo Marco Feruglio no va a salir más y sólo Dios sabe lo que le espera. Yo ahora tengo que restablecer mi familia y apoyar a Romina y abrazar a mis nietos”, escribió Ascencio, quien además dio a entender que los dramas y problemas de Marco se extendían por un largo tiempo

La mujer comentó con el programa El Exprimidor, en FM Latina, algunos detalles de la perturbada vida adulta de Feruglio.

“Hace unos años intentó suicidarse. No sabía qué le pasaba, lo veía enfurecido y se tiró de la parte más alta de la casa. Ocurrió en marzo de 2013 y se salvó por caer sobre una reja. Estuvo internado y cuando le dieron el alta perdió casi el habla, no sentía gusto, estaba raro. Él creía que había tenido un accidente de moto pero le fuimos contando que no tenía moto ni amigo con moto y fue entendiendo lo que hizo”, relató la madre, que además dijo ser testigo de la violencia que ejercía Marco contra la joven Romina.

“Venían a casa y veíamos que Romina estaba marcada. Los vecinos nos contaban que escuchaban gritos. Mi otra hija le decía que lo denuncie y con mi marido la acompañamos”, comentó.

“Acá hubo un problema de fondo que comenzó hace varios años y ambas familias somos culpables, como ustedes quieran tomarlo. Tratamos de buscar soluciones, pero hubo fallas que no pudimos controlar. A veces este tipo de parejas creen que las cosas van a mejorar y empeoran”, dijo Ascenció a La Nación, afirmando además que “siento culpa por lo que hizo mi hijo y no porque este preso.”

Marco Feruglio será imputado como autor de dos homicidios calificados por ser realizados con el propósito de causar sufrimiento a una persona con la cual ha mantenido una relación de pareja, por las muertes de su exsuegro y su ex cuñada. Mientras los otros dos homicidios aún no han sido formalizados, como tampoco los delitos de lesiones graves.