¿Recuerdan a Brittany Maynard? Esta joven estadounidense causó revuelo en el mundo al afirmar que se había mudado a Portland para acabar con su vida. Lo hizo de manera programada, sin dolor y rodeada por su familia: un agresivo tipo de cáncer cerebral que no tenía cura la llevó a tomar esta decisión cuando tenía sólo 29 años.

A cuatro meses de su polémico fallecimiento, una abogada de 46 años está en pie de lucha por el mismo derecho a morir en paz, pero en el estado de California. Se trata de Christy O’Donnel, quien sufre cáncer al pulmón en estado terminal y ya le advirtieron que su muerte será muy dolorosa, ya que se ahogará en sus propios fluidos.

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Como detalla el medio estadounidense People, esta leía unos documentos legales cuando le ocurrió algo extraño: “Cada tres o cuatro palabras, sabía lo que eran esas letras, pero no podía entender cognitivamente qué significaban”, explicó a esta revista.

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Fue al oftalmólogo, quien le dijo que todo estaba bien. No fue hasta que visitó a su médico de cabecera, que la derivaron a Urgencias. Allá le notificaron que tenía cáncer de pulmón en su última fase y además, se había ramificado hacia su cerebro. Con tres tumores del tamaño de una pelota de golf en su cabeza, le pronosticaron menos de 6 meses de vida.

Hoy, ella se niega a mudarse hasta el estado de Oregon, como lo hizo Brittany, ya que no quiere que su hija o ella misma pierdan a sus amigos, familia y estilo de vida. En cambio, quiere luchar por la Ley de Muerte con Dignidad en California:

“Creo que es una terrible injusticia que no tenga la oportunidad de morir de la manera que quiero y en vez me veo obligada a morir probablemente en un dolor prolongado e incluso sola”, afirmó a esta revista.

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“Los doctores nos han dicho que su muerte será dolorosa (…) No es algo que quiera ver”, afirmó su hija Bailey de 20 años. Ella apoya completamente a su madre, quien como buena abogada, piensa poner sus últimas fuerzas en cambiar la ley en su estado.

A diferencia del caso de Brittany, “no tengo una lista de deseos (…) He tenido una vida increíble. Bailey quiere que esté con ella para su cumpleaños (en junio), así que estoy viviendo para eso. Estamos rezando para lograrlo”, concluyó.