El amor se nos nota, porque nos hace andar brillantes por el mundo: hace que nos sintamos queridos, apoyados y admirados por otra persona. ¿Pero qué ocurre cuando esta admiración se transforma en una excesiva dependencia? Se trataría de un poco saludable estilo de relación, como explica el doctor Peter Pearson, fundador del Instituto de Las Parejas.

¿Cómo sabemos si nuestro pololo o polola se volvió co-dependiente de uno? Para empezar, este/a evita completamente el conflicto y siempre se rinde ante tus argumentos en una pelea. Su necesidad de estar de acuerdo contigo es tan grande… que empieza a perder su propia voz.

“Su disgusto por el conflicto es tan grande, que se resisten o evitan hablar sobre lo que es importante para ellos, de manera de mantener la armonía en la relación”, afirmó Pearson en una entrevista al portal de Cosmopolitan. Esto da una falsa sensación de paz y seguridad entre los implicados.

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Se trata de personas que perciben las discusiones -que pueden ser sanas- como una amenaza. “Temen que no puedan estar bien por su cuenta, sin su pareja”, continuó ahondando este experto. Por lo general, las personas co-dependientes no se atraen entre ellos: suelen buscar una persona que sea ruidosa, extrovertida, buena para opinar y emocional, de manera de complementar sus falencias.

Como a través de esta situación sus necesidades nunca son resueltas y muchos temas quedan sin discutirse y sin resolver, eventualmente puede desembocar en una relación maltrecha, donde ninguna de las dos partes se sentirá muy feliz.

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“Tarde o temprano empezarás a sentir que tu pareja es aburrida, porque en una buena relación las personas tienen un montón de diferencias y aprenden a respetarlas”, puntualizó el fundador de este instituto de los pololos.

Entonces, ¿cómo puede dejar alguien de ser pasivo con su relación? Enojarse con ellos y forzarlos a pelear es una pésima idea. El doctor Pearson explica que“las personas co-dependientes tienen “la piel delgada” (no son “cuero ‘e chancho’), pero puedes empujarlos a ser asertivos y preguntar por sus puntos de vista”, explicó el experto.