Más de tres horas tomó la audiencia de formalización donde la Fiscalía de Rancagua formuló cargos contra los presunto responsables del homicidio de la menor de siete años que fue encontrada en la tina de su vivienda, en Machalí.
Los formalizados fueron los padres Silvia Andrade y Víctor Escobar por el delito de parricidio, y Daniela Escobar (hija del matrimonio) junto a su pareja Javier Rivas por homicidio, todos ellos por su presunta participación en la muerte de Dayana Escobar, en el contexto de una supuesta “ceremonia de sanación”, informó la agencia UPI.
Según expuso la fiscal Nayalet Mansilla, especialista en delitos de violencia intrafamiliar, la menor fue encontrada muerta luego que su padre diera aviso a Carabineros, quienes notificaron al fiscal de turno para que concurriera junto a la Brigada de Homicidios para los peritajes pertinentes.
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Hasta ese momento ninguno había prestado declaraciones, pero luego de conocerse la medida que impuso la Fiscalía, los dos hombres decidieron exponer su versión, indicando que cuando ocurrió el hecho ellos no se encontraban en el domicilio, y que las responsables serían únicamente la madre y la hermana.
Asimismo, se expuso en la audiencia que los hechos habrían ocurrido en el marco de un tipo de ritual, según la explicación brindada por testigos de contexto y por las palabras que los propios imputados emitieron al momento de la detención.
El Juzgado de Garantía brindó 100 días para la investigación, y pese a que sólo dejó en prisión preventiva a las dos mujeres, la Fiscalía apeló para que los hombres también cumplieran con esta cautelar. Este recurso será discutido en los próximos días en el Tribunal de Alzada de Rancagua.
