Impactados quedaron los televidentes estadounidenses al conocer el caso de Dee Stein, una mujer de 53 años proveniente de Las Vegas, quien apareció en el famoso programa de cirugías Botched para reconstruir su pecho. La desesperada mujer sólo quería que le quitaran unos pesados implantes de más de 13 kilos, los cuales estaban tan a mal traer que “colgaban” a diferentes distancias.
Como recoge el medio estadounidense New York Daily News, la ex bailarina declaró que “me siento como unos pechos caminantes y me está matando por dentro, porque sé que soy mucho mejor que eso”, le dijo a los médicos del conocido reality.
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La mujer de 53 años afirmó que se sentía tan presionada por el mundo del espectáculo y su carrera, que decidió colocarse los inmensos implantes de silicona y solución salina. “Mientras más grandes, mejor el negocio”, agregó. Pero uno de los implantes de rompió y desinfló hasta convertirse en una especie de bola de bowling colgante.
“Me dijeron que quizás no puede ser solucionado. Siento que no tengo nadie más con quien ir en este punto. Arriesgaría mi vida, porque es tan incómodo, siento tanto dolor”, agregó. Finalmente, el cirujano Terry Dubrow aceptó su caso, a pesar de que ella era “la paciente más desafiante y de mayor riesgo de mi carrera”.
Finalmente, Dee pasó por el quirófano y le dejaron con unos simétricos senos doble D. “Me siento ligera como el aire”, declaró ella con felicidad.
