A comienzos de esta década, lo que estaba de moda eran los hombres metrosexuales: Hablamos de aquellos machos que no temían preocuparse de su apariencia y vestimenta. Después aparecieron nuevas tendencias: Lumbersexual (hombres del tipo “leñador”) y los fanáticos del fitness.
Hoy, estos términos quedaron en el pasado, ya que se imponen los “cuerpo de papi” o en inglés dad bod. La idea se originó un par de semanas atrás, cuando una estudiante de la Universidad de Clemson, Mackenzie Pearson, escribió un ensayo describiendo las bondades de esta clase de sujetos.
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Como rescata la revista digital Playground, la joven de 19 años escribió sobre lo atractivo que era un hombre joven de vida sana, pero ligeramente fuera de línea, sin necesidad de que sea gordo. “El dadbod es un equilibrio agradable entre una panza cervecera y el ejercitarse”, detalló Pearson.
Según la chica, este hombre se identifica con “voy al gimnasio ocasionalmente, pero también bebo generosamente los fines de semana y disfruto de comer ocho porciones de pizza de una”, como agrega. Es decir: Se trata de alguien que ejercita o come relativamente sano, pero no pierde la cabeza por un cuerpo perfecto.
Tal parece que este estilo logra que los chicos luzcan más naturales, humanos y atractivos. Algo completamente distinto al cuerpo que ostentan los fanáticos del gimnasio, quienes luchan por estar cada vez más tonificados, sin importar cuántas horas de entrenamiento ni suplementos alimenticios les cueste.
Su ensayo rápidamente la rompió en Internet, generando cientos de artículos. Pearson afirma que los dad bod tienen varias ventajas, entre ellas, que no son intimidantes ni eclipsan a sus parejas. “No queremos a un chico que nos haga sentir inseguras en relación a nuestro cuerpo. Ya somos nosotras suficientemente inseguras”, explican.
Y agregan: “Nos gusta que la gente diga ‘qué buena pareja hacen’. Pero también nos gusta ser el centro de atención. Nos gusta parecer delgadas y cuanto más grande sea el chico, más pequeñas nos sentimos y mejor lucimos a su lado”. Entre otros puntos positivos, agrega que permiten “mejores ‘cucharitas'” y “mejores salidas a comer”.
¿Y cuándo se pondrán de moda las “cuerpo de mami”? El portal hace énfasis en lo injusto que puede ser esto: Mientras los hombres pueden relajarse con su cuerpo, a las mujeres les piden abdominales marcados y thigh gap. Pero bueno, esperemos que pronto esta moda también se imponga entre las féminas.
