“Yo sé que mi padre va a morir. Pero lo peor es que está totalmente consciente de lo que va a pasar”, decía Miguel Torres sobre su padre, que a sus 83 años, era uno de los miles de contagiados con coronavirus a nivel mundial.
El hispano se tomó una emotiva fotografía con su longevo progenitor, en donde en el fondo se le puede con un respirador, afectado por el denominado COVID-19, declarado pandemia por la Organización Mundial de la Salud en los últimos días.
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La triste imagen fue difundida por el medio El Mundo de España y se dio en el Hospital Rey Juan Carlos de Móstoles, de la ciudad de Madrid. “Hijo, el coronavirus viene por mi”, le había asegurado a Miguel poco tiempos antes, palabras que finalmente se cumplieron.
Eso sí, Torres dio señaló que antes de morir, su padre recibió “un trato inhumano” y que las enfermeras del mecionado centro hospitalario “no lo cuidaban, porque no tenían protección”, recogía el citado medio.

La situación vivida por Miguel y su padre en España no dista mucho a la realidad que viven otros países, como por ejemplo Italia, en donde en algunos hospitales los pacientes son enviados inmediatamente a su casa, dependiendo de la expectativa de vida que tengan.
Así al menos lo declaró Christian Salaroli, director médico del hospital italiano Papa Giovanni XXIII, al medio italiano Corriere della Sera.
“No estamos en condiciones de tentar a los llamados milagros. Es la realidad. Normalmente, la llamada para un ataque cardíaco se procesa en minutos. Ahora puede suceder que espere incluso una hora o más“, indicó el jefe médico.