Una dramática situación vive una familia en Georgia, Estados Unidos, que ha debido enfrentar al temido cáncer. Si bien la lucha comenzó en 2015, hace solo un par de semanas se hizo mucho más complicada.
Todo comenzó hace cincos años cuando Tristen Rush, que tenía cuatro semanas de nacido, fue diagnosticado con retinoblastoma, que es un ‘tumor canceroso que se desarrolla en la retina’. Es muy común verlo en niños, pero nadie pensó que atacaría a una familia casi completa.
Dos años después, el hermano de Tristen, Caison, fue diagnosticado con la misma enfermedad. Increíblemente, en enero de este 2020, Carter, el más pequeño de la familia y quien no supera el año de vida, también fue confirmado con retinoblastoma.
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“Fue un shock y una sorpresa. Fue muy emotivo. A veces es difícil de manejar. Pero son una bendición”, expresó Angie, la madre de los pequeños, al portal CNN. Fue ahí que reconoció que ella padeció el mismo cáncer cuando era niña, y como sabía que era hereditaria, estaba consciente de que podría traspasársela a sus hijos. Claro que nunca pensó que a los tres.
De hecho, había 50% de posibilidades de que fuera heredada la enfermedad: “Carter había estado sano durante seis meses, pensamos que tal vez íbamos a esquivar la bala (…) Pensamos que tal vez él sería el 50 por ciento que no lo tenía”, explicó Aaron Rush, el padre, quien además detalló que su hijo menor tiene tumores en los dos ojos.

Pese a que el pronóstico fue devastador, poco a poco los pequeños han salido adelante. Por ejemplo, cuando Tristen fue diagnosticado, debió pasar por quimioterapias y terapias con láser para luchar contra el cáncer. Afortunadamente, ahora está libre de tumores.
Por lo mismo, fue fuerte para los padres enterarse que Carter pasaría por lo mismo: “Recuerdo el día exactamente cuando fue diagnosticado (…) Es una cuestión de ‘OK, tenemos que entrar en modo de ataque’, qué significa esto, qué tenemos que hacer, qué va a suceder”.
Lo más complejo de luchar con la enfermedad de sus tres hijos, además de todos los tratamientos, ha sido costear los gastos médicos. Aaron y Angie debieron vender su casa para pagar todos los insumos médicos; pese a esto, ellos aseguran llevar una vida feliz y lo más normal posible.
Sumado a esto, crearon una campaña para recaudar fondos, y a la fecha ya llevan más de 74 mil dólares (unos 60 millones de pesos): “Estamos muy agradecidos”.

¿Qué es la retinoblastoma?
El sitio de la Clínica Mayo, explica esta enfermedad como “un cáncer del ojo que comienza en la retina y que afecta con mayor frecuencia a los niños pequeños, y en raras ocasiones puede afectar a los adultos”.
Debido a que afecta generalmente a bebés, es complejo detectar síntomas. Sin embargo, entre los que se pueden notar están: la formación de un color blanco en el círculo central del ojo; que uno de los globos oculares pueda mirar en dirección contraria al otro; sumado a enrojecimiento e hinchazón de los ojos; y generación de pequeños bultos en esa zona.
Al no tener un tratamiento temprano, los tumores pueden afectar la visión de los pacientes, y pueden llegar incluso a generar otro tipo de cáncer. Pese a esto, al hacer el proceso de curación de manera correcta, es muy probable que se revierta el estado.