La pequeña Abigail nació hace apenas cuatro semanas atrás y sus padres, Ericka y Stephen Jones, ya tienen que prepararse para despedirla. Los médicos le confirmaron que es complicado que llegue a celebrar siquiera su primer cumpleaños, debido a su complicado estado de salud.
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Cuando Ericka tenía 18 semanas de gestación, descubrieron que su pequeña tenía Síndrome de Down y un tumor cerebral inoperable. El hecho ocurrió durante un chequeo de rutina y los devastó, ya que ni siquiera sabían si iba a lograr nacer y tampoco podían tratarla por la agresividad de su cáncer, como recoge el medio inglés Mirror.
A pesar de todos sus miedos, Abigail logró nacer el 6 de agosto y han pasado cada día queriéndola en su hogar en Florida. “El neurocirujano nos recomendó que la lleváramos a casa y la cubriéramos de amor. La hemos llenado de amor y besos y lo continuaremos haciendo en cada momento que tengamos”, precisó su madre.
“Esta situación es trágica e increíblemente difícil. Se siente como si viviéramos la vida de otra persona, como si fuéramos otra familia que lees en las noticias. No queremos perder a nuestra hija… nuestros corazones están rotos y rogamos por el tiempo que no tenemos”, agregó Ericka.
Aún así, decidieron fotografiarla para tener un recuerdo permanente de ella. Los padres decidieron compartir las imágenes para ayudar a otros: “Sabemos que la vida de nuestra pequeña Abby tiene un propósito, no importa lo larga o corta que sea”, concluyó.
