Este lunes se vivió una extraña jornada en una corte china, luego de que declararan que un adolescente, de nombre Huugjilt, no era culpable de los crímenes que le costaron su cabeza hace casi dos décadas atrás.
El joven tenía 18 años cuando fue sentenciado a muerte por la violación y asesinato de una mujer en un baño público. Debido a este crimen, el chico fue ejecutado en 1996… hasta que en 2005, el violador y asesino serial que sí era culpable del ataque, aceptó la culpa.
Extrañamente, el autor confeso aún no recibe su pena de muerte y el nuevo juicio de Huugjilt, quien usa un solo nombre como la mayoría de los mongoles, recién logró llevarse acabo hace un mes atrás, arrojando su inocencia.
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El juez jefe de la corte, Zhao Jianping, ofreció sus “sinceras disculpas” a los padres del joven, como detalla el medio estadounidense ABC News con información de la agencia china Xinhua. Debido al error, su familia recibió 30 mil yuanes de compensación (3 millones de pesos chilenos).
La culpa recayó sobre este chico, luego de que él encontrara el cuerpo de la mujer en el baño público; este habría acudido tras escuchar un grito de ayuda. Se cree que China ejecuta a más personas al año, de lo que lo hacen todos los otros países del mundo combinados, pero mantienen las cifras en secreto.
