Cuando era niña, Mariela Sotomayor sufrió bullying debido a su peso y fue un tema que recordó en el estelar de Chilevisión, Podemos hablar, donde también participaron Krishna de Caso, Macarena Venegas, Gonzalo Robles, Eliseo Salazar y Arturo Walden “El Kiwi”.

En la oportunidad, contó el drama que ha vivido por este motivo. “Yo siempre estoy buscando la forma de adelgazar, de bajar de peso y es porque tengo un gran complejo conmigo misma… Mi vida es una eterna lucha con el peso. O sea, ahora mismo me voy a poner un balón gástrico con el doctor Mario Ojeda, porque él me va a operar, porque ya no doy más. Yo voy a seguir buscando la forma de ser delgada hasta cuando lo logre”.

Junto a ello, expresó: “Imagínate que empecé a engordar, a engordar, y cuando chica, estaba en primero o segundo medio, mi mamá me dijo ‘métete al gimnasio’. Y me obsesioné tanto con bajar de peso, que empecé a contar las calorías y tenía una libretita donde anotaba mis calorías, y me comía 1200 calorías al día.

Luego contó que a los 16 años tuvo anorexia nerviosa. “Un día, para no comer, me comí 100 vitaminas C en menos de una hora, porque la ansiedad que tenía era tan grande… O llegué a tomarme 24 tazas de café en un día. O llegué a pesar la comida en una pesa en mi casa, para poder ver si eran los gramos de las calorías que me tenía que comer. Finalmente terminé con mi cuerpo deteriorado”, narró.

“Para mí es un tema que tiene ver con la estética y tiene que ver con la salud. Pero no voy a dejar de decir que en este país a las personas se les da menos oportunidades por su físico”, aseguró, agregando que “soy una persona chica. Mido 1.58 y cuando comencé a salir en televisión fue porque la gente quería saber quién era la que hablaba así como copuchenta. Más encima estaba embarazada. Entonces dije ‘Dios mío, lo que siempre quise fue trabajar en la tele. Y me tiene que tocar estar frente a las cámaras cuando estoy irremediablemente gorda’”.

“¿Qué pasó? Que había trabajado antes siendo una persona con sobrepeso sin estar embarazada y nunca me habían puesto en pantalla. Te digo, esto es un ejemplo, llegué de mi primera hija operada con lipoescultura y a las dos semanas estaba sentada en el matinal”, relató.

Mariela fue enfática en señalar que “la gordura me jugó una muy mala pasada, porque hizo que quizás no me miraran antes, o dijeran ‘mira, esta niña es bien buena, pongámosla por aquí’. No, porque buscaban a las minas lindas y hoy día siguen existiendo, en todos los canales hay una niña bonita que nadie se explica por qué está ahí, pero es muy linda”.