“Fueron horas, fueron días bien duros para mí, para mi familia, principalmente porque sufrí una detención irregular, una detención arbitraria por parte de las autoridades egipcias, principalmente por la policía”.
Estas fueron parte de las primeras declaraciones que entregó Javier Olivares a Teletrece luego que pasara tres días detenido en Egipto y que posteriormente fuese trasladado hasta el aeropuerto para ser deportado.
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Tal como se había dado a conocer este jueves, el periodista relató que al momento del arresto se encontraba en el famoso balneario Sharm el-Sheij, llevando consigo una cámara de fotos, un trípode y una mochila.
Olivares afirma que las autoridades notaron que era extranjero, le pidieron sus documentos y luego lo condujeron hacia un cuartel policial, donde lo mantuvieron encerrado y le robaron 600 dólares, alrededor de 430 mil pesos chilenos.
“Me quitaron mis equipos, que eran personales. No me permitieron conversar con mi familia, tampoco me permitieron comunicarme con nadie, con ninguna autoridad, hasta que logré convencer a un policía y luego de que él me quitara una cantidad de dinero me pasó mi celular y ahí pude recién hablar con mi papá, enviar un mail rápido a la embajada de Chile en El Cairo”, agregó.
La noticia salió a la luz cuando él publicó en Twitter que estaba detenido, mensaje que luego borró. Posteriormente el Ministerio de Relaciones Exteriores confirmó que Olivares estaba detenido y que estaban trabajando para esclarecer la situación.
Más tarde la familia de Javier confirmó que el comunicador iba a ser deportado de Egipto y que el cónsul iba a acompañarlo en el aeropuerto para ayudarlo con el proceso. Y así fue.
“El cónsul me ha acompañado durante todo este proceso junto a otros personeros de la embajada (…) Se encuentra aquí a mi lado y aprovecho de agradecerle”, comentó.
Por último, durante la edición de la tarde de Teletrece José Carlos Pérez, editor de la sección internacional del noticiero compartió una fotografía que le había enviado Olivares de la celda, la que fue sacada cuando él había logrado recuperar su celular por unos minutos.
