El capítulo de este viernes de Verdades Ocultas dejó a todos impactados en redes sociales. Y es que si bien muchos televidentes siempre esperan que algún personaje de esta interminable producción fallezca, nadie anticipó que Laura, el personaje de Marcela Medel, fuera a morir tan de improviso.
La escena fue así: Leonardo aparece, dice un par de cosas sobre Agustina y Rocío, a Laura le da una descompensación y termina muerta. De esa manera concluyó la participación de quien fuera la protagonista de esta teleserie de Mega.
Si hilamos fino, fue bastante absurdo el deceso de este personaje, considerando que quien se dio cuenta que estaba teniendo un ataque era su enfermera personal, que no hizo nada al respecto para poder salvarla.
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Pero retrocedamos en el tiempo, fue en junio pasado que se mostró cuando Amelia atropelló al personaje de Medel. Un accidente tan grave, que la dejó con daño cerebral. Un golpe profundo a la familia Mackenna Verdugo. El problema es que de ahí en adelante esta mujer pasó de protagónico a secundario en cuestión de capítulos. Por cosas lógicas no podía hablar, ni moverse, pero asumo que la idea de eso era guardar los secretos de todos para en algún momento darlos a conocer.
Un capítulo así hubiese sido genial. Imaginen esto, todos reunidos y de repente Laura comienza a hablar y revela que Amelia es en verdad Agustina, ¡boom! Giro total en la teleserie, y los dardos empiezan a apuntar hacia el personaje de Javiera Díaz de Valdés. Pero adivinen qué, esto nunca ocurrirá, ya que por la muerte de este personaje se llevó (literalmente) todos los secretos a la tumba.
Entonces la gran pregunta es, ¿por qué motivo hicieron que Laura quedara cuadrapléjica, si la iban a matar de esta forma? ¿Con qué fin? ¿No hubiese sido mejor que Amelia matara a Laura en el atropello? De esa manera el personaje tenía un término realmente dramático, tal como le pasó a Franco.
Pero no, se fueron por el lado de dejar a la mamá de Rocío sentada en una silla pasando de una casa a otra, pestañeando para decir que sí o no. Si tenemos el argumento de que la mujer no puede decir nada por su compleja situación, por qué no guardarla hasta que en un momento explote con todo. Con ese giro, Laura incluso se pudo haber ganado el cariño del público, que hasta el último minuto criticó su participación en Verdades Ocultas.
Y respecto a ese punto, este fue un claro ejemplo de que no se supo aprovechar el estado del personaje. Si ella se podía comunicar con pestañeos con su enfermera y sus familiares, perfectamente pudo empezar a revelar algunos secretos con respecto a Amelia, por ejemplo. Pero otra vez no, cada vez que Laura se ponía nerviosa, tenía una descompensación y se pasaba a otra escena. Mala jugada.
Con este final para el personaje sólo quedo con una sensación, que incluso se remonta al primer capítulo de Verdades Ocultas. Laura nunca se ganó el cariño del público, por lo que constantemente recibió críticas de los televidentes que pedían que saliera de la historia. Entonces dio para pensar que en un momento, la dejaron en ese estado casi como una manera de escuchar los negativos comentarios, como para dejarla de lado y callada. Pero cuando el equipo tuvo la oportunidad de darle ese giro potente al personaje, la terminaron matando y de la peor forma.
Así es como un protagónico termina pasando sin pena, ni gloria en una teleserie, y así es como un personaje que se pudo haber explotado, termina falleciendo en una plaza y sin revelar nada, absolutamente nada. Ahora con la muerte de Laura sólo puedo recordar esa canción de Cristian Castro que dice “y después de ti, qué, después de ti, qué”.
