VER RESUMEN
Juan Pedro Verdier se destaca como uno de los concursantes más queridos en Mundos Opuestos, siendo reconocido por sus compañeros como el mejor líder del encierro. Agradece el cariño recibido y asume las responsabilidades y riesgos que conlleva su rol. Destaca el apoyo de Ron, Evelyn y Joche, especialmente emocionado por el gesto de este último al no nominarlo. Su reencuentro virtual con Karen Bejarano fue emotivo, rechazando los rumores de montaje en su separación y destacando la madurez de su hijo Guillermo. Aclara malentendidos sobre querer independizarse de la sombra de su expareja y aborda la controversia generada por Daúd Gazale en el reality.
En medio de la intensa competencia de Mundos Opuestos, Juan Pedro Verdier se consolida como uno de los participantes más queridos del encierro. Así lo reconocen sus propios compañeros, quienes lo califican como “el mejor líder del encierro”.
Frente a esto, el exCalle 7 aseguró que ha sido “una sorpresa muy bonita” recibir ese cariño:
“Efectivamente me lo han hecho saber en más de una oportunidad, me han comentado que les ha servido ya sean las palabras de apoyo o la contención en algún momento difícil”.
Acostumbrado al liderazgo desde su paso por Calle 7, Verdier reconoce que ese rol conlleva responsabilidades y riesgos. “Uno se hace responsable de las cosas buenas y también de lo que pueda salir mal. Además, te transformas en un blanco para el equipo opuesto”, explicó, aunque aclaró que si tuviera que elegir, “prefiero serlo; me parece un desafío entretenido”.
El apoyo que recibe Juan Pedro en Mundos Opuestos
El también conductor contó que ha encontrado apoyo en varios compañeros. “En la parte más sensible, me ha ayudado mucho Ron cuando me siento triste o extraño... Evelyn ha sido una gran amiga y un ejemplo como competidora y persona. Y Joche ha sido un pilar fundamental”, destacó.
Incluso relató que su amistad con Joche se reactivó durante el reality:
“En la última nominación, cuando todo el equipo contrario decidió votarme a mí, Joche cambió su opción y votó por otro con tal de no votarme... Eso me hizo feliz y me emocionó”.
El reencuentro con Karen y su hijo
Uno de los momentos más comentados fue su contacto virtual con Karen Bejarano, su expareja. “Sí pensé que podía darse el espacio de hablar, aunque curiosamente nunca había dado su contacto (para hablar en el encierro)”, dijo.
Verdier confesó que la emoción fue inmensa: “Me emocionó muchísimo. No sé si estaba pensando puntualmente en la reconciliación, pero sí tenía muchas ganas de hablar con ella y ver a mi hijo. Fue como una recarga energética, volver a sentirme en familia”.
También se refirió a los rumores de que su separación habría sido un montaje mediático, algo que confesó que le molesta bastante, además de indicar que son las mujeres mayores las más críticas frente a su situación familiar.
“Me pareció tan ridículo como doloroso. Ha sido sumamente difícil estar separado de la mujer que amo, ver cómo se llevan las cosas de mi hijo a otro hogar. Plantear que esto fue estratégico me parece triste”.
Respecto a su hijo Guillermo, explicó que “ha sido muy maduro” durante el proceso. “No lo vi ponerse a llorar, pero sé que lo siente... Siempre estuvimos abiertos a conversar lo que él necesitara”, aseguró.
El participante también aclaró que sus dichos sobre querer mostrarse fuera de la sombra de su exesposa fueron malinterpretados.
“Lo que me molestaba era que dijeran ‘el exmarido de Karen’ como si ese fuera mi nombre. Esta era una oportunidad para conocerme a mí, para bien o para mal, simplemente como soy”.
Su visión sobre Daúd Gazale
Finalmente, Verdier habló sobre su convivencia con el exfutbolista Daúd Gazale, quien ha generado controversia dentro del reality.
“Creo que se ha sido muy riguroso con él. Es competitivo, viene del alto rendimiento y actúa desde esa exigencia", señaló, explicando que su formación hace que reaccione de la forma que lo hace frente a las competencias y el desarrollo de estas, lo que le conlleva muchas críticas.
"No es una persona mala, solo tiene una manera distinta de afrontar el liderazgo. Yo lo hago de otra forma, pero no creo que una sea buena y la otra mala”, aclaró.




