El ascenso a la segunda división del fútbol chileno se definió este miércoles en medio de un escándalo: Deportes Vallenar no se presentó, una semana más tarde, a la repetición, de la tanda de penales tras un error del árbitro y Melipilla fue declarado como vencedor.

La fallida definición tuvo lugar -a puertas cerradas y sin público- una semana después del duelo final de definición del ascenso a la Primera B (segunda división) que ganó Deportes Vallenar después de una tanda de penales para quebrar el empate en los duelos de ida y vuelta.

Juan Silva, delantero de Deportes Vallenar, se detuvo antes de lanzar mientras que el portero de Melipilla Jaime Bravo se adelantó a la jugada. Entonces el juez del encuentro, Eduardo Gamboa, decidió repetir la acción, que finalmente terminó en gol.

Hasta junio pasado, su decisión era la correcta pero en una modificación la FIFA estableció que si tanto el guardameta como el lanzador cometen una infracción al mismo tiempo y el penal termina en gol, éste no se convalida y se debe amonestar al pateador.

Si el juez Gamboa hubiera aplicado la nueva regla, Melipilla se hubiera consagrado como vencedor.

Tras los reclamos de los jugadores de Melipilla, la Federación chilena decidió repetir este miércoles la tanda de penales, argumentando que el equipo arbitral liderado por Gamboa “cometió un error técnico, no de interpretación ni de apreciación, que incidió en el resultado del partido”.

Pero tal y como se había anunciado, Deportes Vallenar no se presentó a la definición, lo que llevó a Melipilla a obtener finalmente el ascenso a la Primera B, según anunció en un comunicado de la federación local.

Así, vestidos como si fueran a jugar, los jugadores de Melipilla celebraron finalmente su ascenso, mientras que Deportes Vallenar anunció que impugnará ante el TAS esta resolución.

Gamboa, en tanto, debe presentarse durante esta semana en la Comisión de Árbitros de la Asociación Nacional del Fútbol Profesional. El juez arriesga seis meses de suspensión y perder su categoría FIFA.