Una doctora está acusada de haber asesinado a su esposo con un martillo, por temor a que este revelara las prácticas sexuales que realizaban, incluyendo el sexo con una adolescente.
Chamari Liyanage enfrenta la justicia por la muerte de Dinendra Athukorala, también doctor, debido a que estaba preocupada de que su inusual comportamiento sexual pudiera dañar su carrera. Al menos así se escuchó en la Corte Suprema del oeste de Australia.
Lee también: Mujer vende su casa embrujada tras vivir traumática experiencia con “cabra fantasma”
Supuestamente la mujer estaba cansada de ser obligada por su marido a participar en tríos con otras mujeres, incluyendo una joven de 17 años de Sri Lanka, con la que la pareja mantenía un romance, según señaló el fiscal Nick Cogan, de acuerdo al medio inglés The Sun.
“Llegó un punto en que ya no estaba dispuesta a tolerar su comportamiento“, agregó Cogan.
Liyanage, en tanto, le confesó a la policía que su marido era físicamente violento, y que la forzaba y obligaba a participar en actos sexuales y que, además, controlaba sus movimientos y finanzas.
El jurado escuchó una llamada de 10 minutos que ella hizo al servicio de emergencias en junio de 2014, entre lágrimas, donde ella dice que no recuerda lo que había ocurrido. Hasta el lugar llegaron los oficiales de policía, y la encontraron en posición fetal sobre su cama.
A su lado, yacía en el colchón Dinendra, cubierto en sangre, la que también salpicó la pared y las persianas. El hombre también tenía una almohada tapando el cádaver.
“Le pregunté si sabía lo que había pasado“, señaló Matthew Curley, uno de los primeros oficiales en llegar a la escena del crimen, pero “
También dijo que había visto un martillo al lado y que cuando preguntó de quién era, ella le dijo que de su marido.
El abogado defensor, George Giudice, indicó que su cliente había estado “privada de sueño, atrapada y maltratada” por su pareja, y que cumplía el rol de modelo con su marido, tan así que a veces debía posar por horas para él, frente a una cámara.
Chamari no se declaró culpable por asesinar a su marido y el juicio continuará dentro de las próximas tres semanas.
