Una adolescente fue golpeada hasta la muerte por su propia familia, quien también la forzó a lamer el WC y comer sus propias heces.
Shahena Uddin tenía 19 años y vivía bajo un régimen de constante miedo y amenazas. Tanto que ni siquiera se les permitía usar los lavatorios de su casa ubicada en la ciudad de Watford, Inglaterra.
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Así vivió durante toda su vida, sin embargo, las cosas empeoraron a fines el año pasado cuando recibió una golpiza que la dejó con severas lesiones en su cabeza y otras marcas en su cuerpo, no obstante, la familia recién llamó a la ambulancia a la mañana siguiente cuando la encontraron sin vida tendida en el baño de la casa.
En ese entonces, señaló al medio británico Metro, el fiscal Stuart Trimmer, sus cuatro hermanos, una hermana y dos hermanastras montaron una operación de encubrimiento en el hogar, pues ocultaron ropa manchada con sangre de Shahena, y limpiaron toda la casa. Lo notaron porque todo estaba en bolsas de basura dispuestas en el exterior de la casa.
Además, a pesar de las evidentes marcas de la joven ninguno fue capaz de explicar el porqué de sus lesiones. Y solo le dijeron al personal de la ambulancia que se había enfermado y, posteriormente, desmayado.
No obstante, las pericias determinaron que la joven fue brutalmente golpeada durante la noche anterior, y finalmente se había ahogado en su propio vómito.
Actualmente la familia se encuentra enfrentando la justicia, y una audiencia se escuchó cómo la joven había sido obligada a comer sus propias heces y lamer un inodoro.
Pese a los antecedentes, ninguno de los hermanos y hermanas se declaró culpable y niegan haber tenido algo que ver con su muerte, por lo que la investigación y el juicio siguen abiertos.
