Aunque Briella Carmichael nació en el cuerpo de un niño, ella siempre supo que era una niña. La menor de edad australiana sufrió durante años encerrada en su propio cuerpo, hasta que un duro episodio hizo reaccionar a su madre.

Aunque muchos la critican porque la niña comenzó su transición a los 5 años, su madre Kirra sabe que tomó la decisión adecuada, tras ver a su hija intentando arrancarse el pene y luego de que llorara en varias oportunidades porque no quería crecer ni tener barba, como recoge el medio australiano Herald Sun.

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Briella estaba tan mal, que llegó a enfermarse por no querer tomar agua en el colegio, para evitar ir al baño de hombres. Por suerte, hoy la situación es bastante distinta. Kirra admite que aunque siempre la ha apoyado, como muchos padres de niños transgénero pasó por el luto de haber “perdido” a su hijo, hasta al fin poder abrazar con felicidad a su niña.

Andrew Batsch
Andrew Batsch

“Estaba preocupada de que el mundo exterior la rechace. Estaba asustada de lo que pasaría cuando no estuviera ahí para protegerla. Ella siempre lo supo. Siempre me preguntaba ‘¿por qué no nací niña?’. Me decía que cada vez que se miraba al espejo, veía una”, relató.

Por suerte, en el colegio la han apoyado, ya que existe un programa de seguridad en la escuela, el cual enseña a los niños a ser tolerantes con otros estudiantes homosexuales, transgénero o de cualquier tipo de diversidad.

Andrew Batsch
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El programa no ha estado exento de polémicas y existen padres religiosos que han retirado a sus niños para que no reciban estas lecciones. Ante esto, el mensaje de Kirra es claro: “Están creando abusadores. Ellos necesitan dejar que la gente sea tal como es”, concluyó.