Divididas se encuentran las opiniones en Irlanda, luego de conocerse el impactante caso de una mujer embarazada que tiene muerte cerebral, pero que no puede ser desconectada de las máquinas que mantienen su organismo “vivo”, por más que su familia lo pida.

El motivo tras esta desconcertante decisión: no pueden hacerlo, porque se consideraría el “aborto” del bebé en su interior. Sus padres están tan desesperados de ver lo que queda de su hija conectada a un soporte vital, que acudirán a tribunales para intentar poner fin a su sufrimiento, como detalla el medio británico BBC Mundo.

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La mujer tiene 16 semanas de embarazo y ha reavivado el debate en torno al aborto en ese país; esta sufrió un trauma cerebral debido a un coágulo de sangre y es imposible que vuelva a la vida. El caso es tan complicado, que las autoridades de la salud irlandesas buscan asesoría legal para determinar si desconectarla se trata de un aborto o no.

Desde la década de los 80 que una enmienda a la Constitución de Irlanda le otorga los mismos derechos a la vida de la madre y el feto; algo similar a la situación que ocurre en Chile. Pero este impactante caso ha vuelto a generar discusión en torno al tema, porque. ¿Qué es más importante? ¿La paz de esta mujer y su familia… o el posible nacimiento de este bebé?