Ya no es sorpresa cuando se habla que Los Simpson ‘adivina’ algún hecho, es que el proyecto de Matt Groening en diversas ocasiones increíblemente ha sorprendido con sus ‘predicciones’.

Es así como otra vez la serie de la popular familia amarilla acierta con otra escena que nos recuerda la delgada línea entre la ficción y realidad.

En esta oportunidad el escándalo acontecido en Latinoamérica por la lista de ‘vacunados VIP’ ha puesto en la palestra los supuestos ‘privilegios’ que tendrían ciertas personalidades.

La citada escena corresponde a un capítulo de la temporada 22, en donde el malévolo Señor Burns realiza una egoísta petición al Alcalde Diamante y personal médico: “Quiero 37 dosis de su jarabe contra la influenza, una para mí, otra para Smithers y el resto para mis perros”, solicitó.

Estas personas esperaron en fila y los perros no contraen la enfermedad”, explica el Doctor Hibbert frente a la sorpresa de los residentes de Springfield.

Mientras que el alcalde acepta la petición del empresario señalando que “denle lo que quiere, es el único que paga impuestos”.

Luego de recibir las dosis, Burns y Smither abandonan el lugar rápidamente en un auto, sin darse cuenta que destruyeron una caja llena de vacunas destinadas a los demás vecinos.

Esta escena fue rápidamente viralizada, y recuerda la polémica sucedida en Argentina, en la que está involucrado el Ministerio de Salud y el Hospital Posadas, donde funcionarios, personalidades y ligados al gobierno recibieron la vacuna contra el COVID-19 en desmedro de gente que realmente lo necesita.