Impacto ha causado la difusión del video de un arresto llevado a cabo en un estacionamiento de Texas. Todo comenzó cuando denunciaron a una mujer, Viviana Keith, quien conducía su automóvil ebria con su hija de 6 años arriba. Es por esto que fue interceptada por un oficial de policía a las afueras de un centro comercial.
Lo fuerte de la situación es que de pronto, el hombre la lanzó hacia el suelo. La cabeza de Viviana golpeó el pavimento, por lo que quedó completamente inconsciente, mientras su niña gritaba “¡mami, mami!”, como detallaron testigos al canal KVUE-TV.
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Desde la policía afirmaron que la mujer estaba claramente intoxicada en un lugar público, que había conducido ebria y además, se había resistido al arresto ejecutado por Ben Johnson. “El oficial fue muy profesional, él la estaba calmando, no estaba alterado ni enojado”, detallaron.
“Es desafortunado que la mujer se golpeara la cabeza y se desmayara, pero te digo, el oficial hizo lo que debía en una situación así”, afirmaron.
Una de las testigos, Viviana Garcia, afirmó que “la pequeña niña gritaba ‘mami, mami’. Parecía que estaba muerta”. Mientras que el hombre que filmó el encuentro temió lo peor: “Cuando revisé el video, pude ver su cabeza rebotando en el concreto porque cuando él la derribó, ella no fue capaz de afirmarse. Estaba absolutamente inconsciente”, explicó.
El oficial la dio vuelta y tomó su pulso, hasta que llegaron los médicos al lugar. En su fotografía policial se ve que la mujer terminó con un ojo morado. Aunque haya sido el procedimiento adecuado, esta imagen no se irá con facilidad de la mente de quienes fueron testigos.
