En la transmisión de un nuevo capítulo de La Divina Comida, los grandes protagonistas fueron Álvaro Escobar y Nicolás Peric, quienes con sus divertidas anécdotas e histriónicas personalidades, se robaron la película en el estelar de CHV.

Por un lado, Álvaro, además de mostrar su buen sentido del humor, demostró que pese a cocinar bien, no se maneja mucho en la cocina. Esto quedó en evidencia cuando comenzó a preparar su menú para el resto de los comensales.

Primero, al preparar la entrada, el locutor de Radio Bío Bío ensució sus manos tras dejar caer crema al suelo. Luego cuando quiso montar los platos, dio vuelta sus ‘Más vale parmesana’ en el horno eléctrico. Un problemático inicio para el anfitrión de La Divina Comida.

Debido a estos errores, Nicolás Peric fue al rescate de su compañero, y lo hizo de gran forma. Esto porque cuando Álvaro se disponía a servir carne mechada con puré, casi bota el sartén que contenía toda la salsa. Fue gracias a la rápida reacción del portero que el actor se salvó de arruinar lo más importante de su preparación.

“Me salvó la noche, este hueón es bueno”, atinó a decir Escobar, ante el felino movimiento del arquero de Audax Italiano. Eso sí, debido a esto, Nicolás tuvo un pequeño problema.

“Me quemó los dedos, se le cayó el sartén y me quemó tres dedos”, comentó entre risas Peric. Pese al dolor, esto fue clave para salvar la preparación de Álvaro, que fue de los más destacados de la noche.

Te dejamos algunas de las reacciones que dejó este divertido momento en La Divina Comida.