Rachel Rosenberger se hizo conocida en nuestro país gracias a su participación en el docureality Los Perlas, donde vivió diversas aventuras junto a la gitana más famosa de Chile y los ‘loquillos’ ‘Dash y Cangri’.
La ‘gringa’, como se hizo conocida en ese programa, se vino a Chile desde Milford, Estados Unidos, donde estudió español por cinco años en la Universidad de Illinois, y se tituló como profesora de inglés. Al llegar a nuestro país la joven vivió los primeros días en una hostal de Providencia, luego se cambió a una pieza en Recoleta, y debido al programa vivió varios meses en la casa de Perla.
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Durante su estadía conoció, en un matrimonio, al comunicador Matías Vega, actual notero de Bienvenidos, con quien inició una relación a fines de 2016 y hace algunos meses contó que estaban felices de la vida pues comparten muchos intereses en común, algo que se puede apreciar en el canal de YouTube que tienen en conjunto, llamado ‘La gringa Rachel‘.
En conversación con Página 7, Rachel contó que está enamorada y siguen construyendo algo ‘bacán’. “Llevamos casi un año y comenzamos a vivir juntos hace muy poco, y ha sido una experiencia genial“, señaló.
Rosenberg aseguró que no podría haber pedido algo mejor, ya que es “súper piola” vivir con Matías, incluso comparten un hábito que muchos pueden considerar un problema pero que para ellos es algo natural. “Somos súper desordenados los dos, siempre está todo tirado, pero ambos nos entendemos y asumimos que el otro es así no más“.
No obstante, consultada por lo más difícil que le ha tocado enfrentar durante esta convivencia, la popular ‘gringa’ reveló a nuestro portal que la cercanía de Vega con su familia, fue algo que al comienzo le chocó. “Al principio me llamaba la atención que Matías sea súper de familia, porque mi familia no es muy cercana, y de hecho ha sido él quien me ha enseñado a relacionarme con mi familia y hoy en día tengo una relación genial con ellos gracias a él“, comentó.
Rachel señaló que al comienzo no entendía por qué tenían que ir almorzar con su familia los fines de semana, porque ella no estaba acostumbrada a eso, ya que en Estados Unidos no suele mezclarse pareja y familia. A diferencia de eso, Matías se la presentó de inmediato, y la recibieron muy bien. “Ya soy parte del chat familiar de WhatsApp así que feliz, han sido muy buena onda conmigo, me quieren mucho“, remató.
