Hace algunas semanas, la noticia de la separación de Camila Recabarren y Joaquín Méndez, sorprendió al mundo del espectáculo ya que se veían como una de las parejas más estables.
Y es que ambos se conocieron al interior del reality, Volverías con tu Ex?, desde donde salieron de la mano y vivieron un romance de aproximadamente un año.
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Fue tanto el amor, que la ex Miss Chile lo llevó a vivir a su casa donde inició una estrecha relación con su pequeña hija Isabella. Sin embargo, aunque los motivos no están del todo claros, ambos decidieron no continuar la relación y comenzar a vivir una vida por caminos diferentes.
Respecto a este hecho, Camila señaló a LUN que “no es fácil, pero depende de una cuánto rato quieres estar deprimida”.
Además reconoció que a los 15 años tuvo su primera pena luego de la separación de sus padres. “Mi papá me llevó donde una siquiatra que me recetó unos remedios para ser feliz. Con el tiempo pensé qué onda la doctora. Cómo es posible que tomándote una pastilla sea feliz. Desde ahí no creo en esos tratamientos. Después he tenido muchas penas más y las enfrento solita, como debe ser”.
En marzo nuevamente sufrió tras el quiebre con Joaquín y además, hace una semana el argentino se fue de la casa. “Ese día sentí mucha pena. No quise salir ni hacer nada. Lloré todo lo que tenía que llorar, pero no voy a estar eternamente mal por alguien”.
Sobre lo que Camila hace para superar la tristeza, indica que “puede sonar místico, pero hay que cerrar todos los círculos para no dejar nada pendiente y ver los problemas como un gran aprendizaje. Concretamente cuando tengo pena escucho música, me tomo una cerveza aunque esté sola, me como un chocolate y me voy con mi pelota de básquetbol a una plaza. Ahí la lanzo y la lanzo hasta que siento que voy botando la pena. Hacer deporte es súper bueno”.
