A finales de mayo de este año, todos nos enteramos de unas presuntas acusaciones de acoso sexual que involucraban al reconocido actor Morgan Freeman.

Dieciséis personas, entre ellas ocho mujeres declararon haber sido víctimas, describiendo incluso una perturbadora conducta del aclamado actor en el set y en viajes promocionales.

En el reportaje elaborado por CNN, dicha cadena citó a una joven asistente de producción que sostuvo que fue acosada por Freeman durante meses en el verano boreal de 2015, cuando trabajaba en su comedia criminal Un golpe con estilo.

Pasado casi 9 meses de dicha noticia, las acusaciones habrían quedado en nada, ni siquiera llegaron hasta la justicia, según informa El Mundo ¿Por qué?, todo se habría tratado de un montaje periodístico.

En un artículo publicado por el portal Red Ética de la Fundación de Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, se explica que la periodista CNN, Chloe Melas, elaboró evidencias para acusar a Freeman. “Todo fue un fraude de una reportera racista de CNN”, escribió el autor del texto, Tomoo Terada.

En el escrito se explica que “de las 16 personas que acusaron al actor, 14 eran anónimas, y que posteriormente dos de esas fuentes confirmaron que nunca tuvieron problema alguno con el actor”.

Además, se señala que la única prueba de esas acusaciones sería un video presentado por Melas que se sacó de contexto. “Freeman usaba la frase ‘¡Ojalá hubiera estado allí!’, como si hubiera querido ser él el que hubiera dejado embarazada a la periodista, en avanzado estado de gestación en ese momento. En realidad, fue una reacción a una anécdota que compartió Michael Caine momentos antes durante la promoción de la película Un golpe con estilo“, se detalla en el texto.

CNN niega todo

Por su parte, desde CNN se han mantenido firmes al reportaje y respaldando a la periodista, además de acusar al abogado del actor Robert M. Schwartz, de defender al actor con una carta de 10 páginas llenas de “falsedad y especulaciones vacías”.

“CNN respalda sus informes y responderá enérgicamente a cualquier intento del señor Freeman o sus representantes para intimidarnos de cubrir este importante problema público”, declaró el portavoz de la estación televisiva.

Ahora solo queda esperar si la periodista acusada de dicho montaje responderá al respecto y determinar si realmente fue un show o una verdad que se quiere esconder bajo la alfombra.