La noche de este domingo Chile vivió uno de los momentos más importantes para el cine luego que la película Una mujer fantástica ganara la categoría de Mejor Película Extranjera, en la entrega de premios Óscar.

Fue Chilevisión el canal encargado de transmitir la ceremonia más importante para la industria, que contó con la conducción de Julio César Rodríguez, acompañado de René Naranjo, Angélica Castro y Martín Cárcamo.

Fue la presencia de este último la que llamó la atención de los televidentes, aunque más tarde se supo que el animador de Bienvenidos, era productor asociado de la película de Sebastián Lelio.

“Me invitaron a participar en un porcentaje pequeño dentro de una estructura muy grande”, señaló sobre su aporte económico Martín Cárcamo a LUN.

Además, su labor se remitió a ayudar a promocionar el filme, como por ejemplo cuando el elenco visitó un capítulo de Vértigo. Pero además influyó en que fuera Canal 13 el que transmitiera la película.

Pero para Martín no se trató solo se trató de un buen negocio, sino que también lo hizo por la amistad que mantiene con Sebastián Lelio.

“Nos conocemos desde hace 20 años, cuando éramos muy jóvenes. Trabajamos juntos en Chilevisión, yo animaba Extra jóvenes y él era realizador audiovisual en El futuro de Chile”, expresó.

“Con Sebastián nos empezamos a hacer amigos en la máquina del café, donde ademas estaban los chocolates, ahí conversábamos de los sueños. En esa época yo ya producía teatro”, detalló.

Cabe señalar que Martín también fue parte de Gloria. “Me llamaron para participar como inversionista y productor asociado. Me mandaron el guion, lo leí en una tarde y me emocioné. Me subí al carro para también conseguir financiamiento y desarrollar la estrategia de difusión”, puntualizó.

Respecto a dicha participación, Martín prefiere no hablar de dinero aunque sí explicó que “no me gusta hablar de plata pero hacer una película requiere muchos recursos. Era un riesgo que asumí porque creí en el proyecto, pero nunca pensé que sería un éxito mundial”.

Además ayudó a conseguir locaciones como el Casino de Viña y participar en una gira de difusión. En el caso de Una mujer fantástica, no era necesario su apoyo, aunque de todas maneras lo llamaron, según el propio Martín.

Sobre la estatuilla, Cárcamo aseguró que su intención es sacarse una fotografía con ella para ponerla en un lugar destacado de su casa.