Esta es una historia real. La sangre corre en el suelo tras 37 puñaladas de odio, ira y locura. No contenta aún toma su cuerpo para colgarlo del frío y penetrante gancho carnicero del matadero. Lo tortura en la agonía, lo mira, se ríe y lo castiga de la peor manera, sacando su piel, lenta pero brutalmente. Los gritos ahogan la habitación, hasta su último respiro.
Luego con las herramientas de carnicero lo desmembra, lo mutila, lo descuartiza, para hacer una sopa con la que más tarde alimentaría a sus tres hijos. Se lleva su cabeza como un ‘sabroso’ trofeo.
Katherine había torturado, descuerado, matado, decapitado y cocinado a su propio esposo, sin piedad, la sangre fue testigo de la cruenta y terrorífica escena perpetrada en una oscura noche en Australia.
La cabeza de John Price, delató a su esposa Katherine Knight, la asesina, ya que fue encontrada por la policía en una olla, junto con parte de las nalgas del fallecido, tal como versa la cruenta historia que luego de casi 15 años sigue atemorizando a Australia y el mundo.
Finalmente tras el éxito del libro de no ficción que narra la historia, escrito por Peter Lalor en el ‘best seller’ Blood Stain (Mancha de Sangre), la historia llegará finalmente al cine, de la mano del mismo escritor.
“Me asusté de leer el guión. Está hecho para el cine. En la investigación lo que realmente me sorprendió fue lo común y corriente que se veía. Llevaba un bonito vestido y un crucifijo alrededor de su cuello, como se hace cuando se está frente a una acusación de asesinato”, comentó el autor, que además revela otros detalles del espeluznante homicidio.
“Sus ex compañeros eran mineros del carbón, camioneros, tipo duros. La mayoría lloraba cuando hablaba de ella y el abuso que sufriendo de su parte”, aseguró el investigador.
“Ella tenía una historia de maldad y una enfermedad mental,un trastorno límite de la personalidad. Eso no es de ninguna manera una excusa ni lo es el abuso en su propia familia. Ella estaba enferma, pero había una marca de mal en ella. Fue un acto de venganza, pero no se hizo en el calor del momento”, agregó el escritor dejando un manto de misterio y terror en el ya denso aire.
Cualquier guionista de terror hollywoodense hubiese querido escribir esta violentamente aterradora historia, que hace recordar los hechos ocurridos en Molina en 2014 cuando, la comerciante ambulante Rossana Andrea Valdés Caro, conmocionó al país con un crimen muy similar.
La vendedora mató a su esposo luego de una discusión por dinero y mujeres con un revolver y la mañana siguiente cortó el cadaver con un cuchillo de sierra para posteriormente hervir el cráneo y las extremidades en un fondo de 50 litros, tratando de deshacerse del cuerpo de manera desesperada.
Otra horrorosa y dramática historia, que quizás inspirada en la experiencia que se vivirá con la primera mujer australiana condenada de por vida y sin beneficios en el Cine, también pueda llegar a la pantalla grande, para generar gritos, espanto y terror en la audiencia.
Casos de descuartizamiento y horror también han marcado la historia de Chile. En octubre del 2013 quedó al descubierto el horroroso crimen de Marta Peña (31)cuyo cuerpo descuartizado fue encontrado en el paso bajo nivel ubicado frente a la cárcel Santiago I. Sin ir más lejos, aún se comenta la misteriosa y horrorosa muerte de Hans Pozo, mientras que hace sólo semanas la opinión pública fue devastada con el cruento asesinato de la colombiana, Juliana Andrea Acevedo, también por parte de su pareja, Edwin Vásquez Ortíz.
Todas estos violentos, macabros y escabrosos asesinato podrían sin duda inspirar algún guión cinematográfico, dando cuenta de que la realidad siempre termina superando a la ficción.
