Todo el mundo ha escuchado hablar de las infecciones urinarias o, incluso, son muchas las personas que las han padecido.
Si bien las mujeres son más propensas a contraerlas, lo cierto es que a los hombres también los puede afectar.
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Así lo reveló Mónica Valenzuela, directora de la Escuela de Enfermería de la Universidad de las Américas, a Página7, quien explicó que “las más propensas a contraer una infección urinaria son las mujeres más que los hombres”.
En ese sentido, precisó que esto se debe a un tema anatómico, “ya que en la mujer la zona perianal se encuentra con menor distancia. Es decir, porque la uretra es más corta en ellas y esa es una menor distancia para que la bacteria pueda recorrer e ir hacia la vejiga”.
¿Qué es una infección urinaria?
La especialista indicó que “es una infección de las vías urinarias, que se produce en el sistema urinario, que va desde los riñones, los uréteres, la vejiga y la uretra”.
Agregó que la mayoría de estas infecciones ocurre en las vías urinarias inferiores, “es decir, en la uretra y la vejiga. La primera es la zona por la cual la persona orina y más arriba se encuentra la vejiga”.
La infección urinaria surge por el ingreso de bacterias a las vías urinarias “a través del contacto que se tiene con el exterior, que es la uretra y comienzan a multiplicarse en algunos casos en la vejiga. Aunque el sistema urinario está preparado para impedir el ingreso de estas bacterias, en algunas oportunidades estas medidas de protección fallan”.
Valenzuela explicó que la infección dura aproximadamente entre 24 a 48 horas después de que se empieza el tratamiento, el que normalmente es con antibióticos, “por lo que es necesario ir al médico para que entregue la receta y también pueda hacer un examen de orina y ver cuál es la bacteria que está provocando esa infección. Cuando llega a los riñones, puede demorar una semana o más tiempo para que desaparezcan los síntomas”.
¿Cuáles son los síntomas de una infección urinaria?
La experta señaló que “son ardor y dolor al orinar con frecuencia, sentir la necesidad de orinar seguidamente, aunque la vejiga se encuentre vacía. Es decir, ir al baño y solo caen unas gotas”.
En esa misma línea argumentó que en algunos casos más graves “también puede haber sangre en la orina, dolor en la ingle y en la parte inferior en el abdomen. Un dolor tipo presión, que puede causar incluso inmovilidad”.
¿Cómo aliviar las molestias?
Valenzuela precisó que se debe beber mucha agua, “ya que de este modo se diluye la orina y eso facilita la expulsión de las bacterias que se encuentran en esa zona. También poner compresas térmicas, es decir, calor en la zona del bajo vientre, que ayuda aliviar el dolor de la infección urinaria”.
La especialista es enfática en decir que “es importante recurrir al médico en el caso de tener una infección urinaria para poder tener un tratamiento con antibiótico que pueda eliminar la sintomatología y también impedir que sea más grave”.
Detalla que en una situación más grave, puede “ir acompañado de fiebre alta, vómitos y puede haber dolor en un costado de la espalda o zona lumbar”, finalizó.
