El ánimo con el que uno amanece puede marcar el rumbo de la jornada, sobre todo en lo laboral. Ahora, con el desconfinamiento y el regreso al trabajo presencial, muchos han vuelto a encontrarse con el apuro de los desplazamientos matutinos y otros factores estresantes.

“Dentro de una empresa, son los colaboradores los que llevan a que haya un buen fin en los proyectos institucionales. Cuando el colaborador se siente feliz realizando su trabajo, el dinamismo y la motivación por la obtención de las metas es mucho más amplio“, explica Andrea Arredondo, psicóloga clínica con magíster en educación y especialista en crisis.

La profesional -que trabajó por años en la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS) y actualmente reside en Houston, Texas- indica que es fundamental el bienestar del trabajador, también entendido como “felicidad” en el ambiente laboral.

Esto porque la persona aumenta su concentración, bajan las posibilidades de sufrir accidentes laborales y disminuye también el ausentismo. “Básicamente, aumenta la productividad de su trabajo, así que sin duda el estar ‘feliz’ influye directamente en que a una empresa le vaya mejor”, añade.

En ese sentido, el sitio Huffington Post realizó un listado de seis cosas que se pueden hacer en las mañanas para tener un mejor día en el trabajo.

Beber agua al despertar

Según el Instituto Europeo de Hidratación, una adecuada hidratación, sobre todo en ayunas, es importante para el correcto funcionamiento del cerebro.

Cuando estamos adecuadamente hidratados, las células del cerebro reciben sangre oxigenada y este se mantiene alerta.

Es un ejemplo simple pero efectivo de que basta con pequeños ajustes para mejorar el resto del día.

tomar agua
Pixabay

Haz algo que te guste y pon en perspectiva los contratiempos

Puede ser yoga, meditación, escribir algo, leer, escuchar música, hacer alguna actividad física o simplemente tomar una taza de té. La idea es comenzar la jornada haciendo algo que te guste y esté centrado en ti y no en tu trabajo.

Para ello, lo ideal es levantarse con tiempo suficiente, lo que le permita al individuo prepararse y comenzar el día evitando situaciones complejas.

“Cuando uno se levanta al filo, seguramente ocurrirá algo que te hará llegar atrasado, o te subirás a una micro llena, o no vas a encontrar locomoción. Puede ser que te toque un reto del jefe, lo que va a cambiar tu genio, trabajarás más lento y desmotivado, y hasta podrías llegar a discutir con otra persona”, advierte la psicóloga.

Todos hemos vivido malos espacios de tiempo, malas mañanas o malas tardes en el trabajo. “Se ha aprendido que lo que otros te digan generalmente no tiene mucho asidero. Eso quiere decir que finalmente es uno mismo quien debe afrontar estas situaciones y darse un mensaje en el que te calmas o consideras la herramienta maravillosa que es el humor“, recomienda Arredondo.

mal humor en el trabajo
Pixabay

En esa línea, es importante recurrir a la resiliencia y obviar los factores o personas que no aportan y que podrían, en efecto, arruinar nuestra mañana (y el resto de la jornada, si lo permitimos).

“A veces los pacientes necesitan un ‘tiempo fuera’, y me cuentan que van a un baño o a un estacionamiento. Ahí buscan formas de descargarse para cambiar la emocionalidad… Podemos recurrir a esos tips en aquellos días nefastos en que parece que todo nos sale mal”, señala como consejo.

Establece límites y cuida tu salud

El artículo del HuffPost indica que es necesario identificar todo lo que te resulta estresante por las mañanas. Eso puede ser, por ejemplo, revisar mensajes pendientes, ya sea en el correo o en el WhatsApp.

Si tu primer impulso al despertar es tomar el celular por ansiedad, mejor evítalo. Puedes probar la idea de dejar el teléfono en un lugar apartado de la cama, y así no será una prioridad al abrir los ojos por la mañana.

Lo ideal es sustituir esa “mala costumbre” por otra que afecte positivamente tu energía.

Lo mismo corre con el bienestar físico. Si sientes algún dolor o malestar muscular, tómate unos minutos para solucionarlo: libera la tensión a través de elongaciones, relájate con un momento de respiración controlada, o incluso puede que un paseo corto te ayude a cambiar de aire y poner el cuerpo en movimiento.

estiramiento trabajo
Pixabay

Asume que el trabajo no es la fuente de tu felicidad

La mañana es un momento esencial para darse espacios a uno mismo, “hidratándose y alimentándose bien para que el cuerpo funcione mejor”, recomienda la psicóloga Andrea Arredondo.

Según sus palabras, la idea es hacer contacto con uno mismo “y visualizar un día en que van a pasar cosas positivas“, tanto en lo laboral como en lo personal.

“Evitar pensamientos, actitudes y personas que no nos conducen a una emocionalidad positiva. Finalmente, la felicidad es eso: poder brindar espacios donde nos sentimos satisfechos, donde estamos en paz y en calma. Es un estado que produce comodidad, confort y mayor productividad”, concluye.