Las legumbres o leguminosas, son un alimento muy nutritivo gracias a su alto contenido en hidratos de carbono, proteína y fibra.

Por lo mismo, es un indispensable en cualquier despensa.

No obstante, hay quienes evitan su consumo por las molestias que puede provocar a nivel digestivo un buen plato de porotos o garbanzos, por ejemplo.

Y es que los gases o flatulencias no son buenos aliados de nadie y pueden transformar la sobremesa en una experiencia desagradable para la persona… y para el resto, por cierto.

Por lo anterior, existe una técnica infalible que -seguramente- en muchas casas se ha practicado por décadas y es dejarlas en remojo por un tiempo de ocho horas aproximadamente.

Si bien la llegada de ollas a presión y otros artefactos similares, nos han hecho creer que no es necesario remojar las legumbres y cocerlas directamente, la verdad es que esta práctica no solo acorta el tiempo de la cocción, sino que también es fundamental para evitar los gases y otras molestias digestivas.

Esto porque el hidratar las legumbres genera que se disuelvan las membranas de la piel, liberando los azúcares oligosacáridos, principales responsables de los gases intestinales.

Por lo mismo, se recomienda eliminar el agua del remojo y no usarla para la cocción.

Lo anterior, pues pueden quedar azúcares, además de residuos de ácido fítico y tanitos, los que también producen gases por fermentación en el intestino.

Hierbas y especias

Otra forma de evitar los gases, es aplicando diversas hierbas y especias a la cocción.

El comino, el laurel, el anís, el orégano, el romero y el hinojo, son algunas de las hierbas que evitan los gases y otras molestias relacionadas.

Puedes añadirlas a la preparación o bien consumirlas después de comer como una infusión. En ese sentido, puedes incorporar también menta, canela, manzanilla, jengibre y cardamomo.

Por último, otro secreto infalible, es aplicar una cucharada de bicarbonato de sodio al remojo de las legumbres o incluso puedes agregarla directamente a la preparación, pues además de favorecer el aparato digestivo, acelerará su cocción.

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