La diabetes es una enfermedad crónica causada por una hiperglicemia sostenida en el tiempo, es decir, un exceso de glucosa (azúcar) en la sangre, teniendo etiologías que alteran el metabolismo de los carbohidratos, proteínas y lípidos. Existen básicamente dos tipos: Diabetes Mellitus Tipo 1 y Diabetes Mellitus Tipo 2.

A nivel mundial, esta enfermedad se ha incrementado considerablemente en las últimas décadas y por ello la OMS ha declarado el 14 de noviembre como el Día Mundial de la Diabetes, con el fin de hacer un llamado de atención para la prevención y detección temprana de esta patología.

En ese sentido, una investigación de la Northwestern University, en Chicago, Illinois, Estados Unidos, reveló que desayunar antes de las 8:30 ayuda a reducir el riesgo de padecer diabetes tipo 2, esto porque permitiría disminuir la resistencia a la insulina.

El equipo, liderado por la endocrinóloga y diabetóloga Marriam Ali, analizó a 10.575 adultos, quienes participaron de una encuesta nacional sobre salud y nutrición para descubrir patrones entre el horario de las comidas y los niveles de azúcar en sangre e insulina, consignó Las Últimas Noticias.

La intención principal del estudio era obtener nuevos conocimientos respecto al ayuno pero encontraron que “quienes comenzaron a comer más temprano en el día tenían niveles más bajos de azúcar en la sangre y menos resistencia a la insulina, independiente de si restringían su ingesta de alimentos a menos de 10 horas al día”, explicó la doctora Ali en un comunicado.

“Esto sugiere que la comida consumida en la mañana tiene más beneficios metabólicos en general que la duración del ayuno”, resaltó.

¿Y que debe tener nuestro desayuno? El nutriólogo Jaime García comentó al citado medio que “nos hemos dado cuenta de lo importante que es tener un ritmo de comida y ese ritmo parte por un buen desayuno. Este debe contener hidratos de carbono no refinados, proteínas y un aporte de lípidos de buena calidad”.

Estima que un desayuno antes de las 8:30 “es perfecto, pero depende de cada persona y puede ser entre las 7 y las 9 de la mañana y la última comida que no sea más allá de las 22 horas“.

Este estudio se presentará en la reunión anual de la Endocrine Society que se inicia este sábado y se prolongará hasta el martes 23 de marzo.