Hace uno días fuimos testigos de cómo una mala maniobra al volante desató la ira de un chofer de un camión quien, en plena vía pública de la comuna de Providencia, no encontró mejor solución que chocar en reiteradas ocasiones al otro vehículo e incluso botar un poste.
Un hecho que podría ser aislado, pero la verdad es que estas situaciones se repiten a diario en distintas latitudes, producto del estrés al que están sometidas muchas personas. La violencia y el descontrol en la vía pública son -lamentablemente- situaciones cotidianas.
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En ese sentido, ¿qué hacer si nos vemos enfrentados a una persona que pierde los estribos? ¿Cómo debemos actuar para no caer en el mismo espiral de violencia?
Jorge Fuentes, psicólogo y director de Pranavida, plantea que “estas situaciones ya las veníamos viendo antes de la pandemia, porque la salud mental en nuestro país está hace muchos años deteriorada. Sin embargo, la situación que hemos vivido durante este último año producto de la crisis sanitaria, puede aumentar la frecuencia de este tipo de hechos, los que son, finalmente, una señal de alerta de que debemos hacernos cargo de las emociones y sentimientos que nos están afectando”.
Por lo anterior, el experto detalla al menos cinco consejos para hacerle frente a una persona descontrolada.
1.- Respira y escuchar y no respondas con ira
“Es muy fácil que, ante vernos atacados tratemos de defendernos poniéndonos por encima de la otra persona, ya sea alzando más la voz o enfrentando al otro. Para evitar caer en eso, lo más importante es respirar lentamente y profundo para tratar de bajar las emociones que estamos sintiendo”, recomienda Fuentes.
En esa misma línea, como será necesario generar un espacio de conversación, es importante que en él sepamos escuchar y no tratar de defendernos respondiendo sin escuchar el descargo de la otra persona. “El encuentro se transformará en un diálogo de sordos que no terminará bien”, agrega.
2.- No recrimines el comportamiento, pero tampoco le des la razón
“Cuando estamos frente a una persona que está descontrolada hay que evitar juzgarlo, ya que repetirle que no tiene control de sí puede sentirlo como un ataque y alterarlo aún más. Pese a ello, tampoco es bueno darle la razón de la nada, ya que puede sentirlo como una burla”, advierte el psicólogo.
3.- Evita sonreír
Es normal que en momentos de tensión y producto de los nervios, tengamos reacciones como sonreír o similares, para intentar calmar el ambiente, sin embargo, si estamos frente a una persona alterada, esto podría ser tomando como una burla, y exacerbar aún más la conducta de la persona que tenemos al frente.
4.- Mantén la distancia
En este punto, el especialista indica que “ante situaciones de violencia verbal es importante mantener la distancia, pues no sabemos hasta qué punto puede llegar la otra persona y en qué momento puede pasar a la agresión física”.
5.- Terminado el conflicto, desahógate
Por último, cuando ya no estemos bajo esa situación de estrés, es importante que nos desahoguemos, ya sea conversando con alguien o tomarte un minuto a solas para eliminar ese estrés al que nos hemos visto enfrentados. “El haber estado ante una situación como esta y el lograr el control de ella genera un desgaste emocional importante que requiere ser abordado para que no afecte durante el resto de la jornada”, aconseja.
