A casi un año de la llegada del coronavirus a Chile, se ha vuelto fundamental no solo la medicina tradicional, sino también las terapias de relajación y otros métodos preventivos para mantener el equilibrio -físico y mental- en medio de un escenario complejo.
En ese sentido, una buena alternativa es la medicina china, que incluye la práctica de masajes, acupuntura, ventosas y auriculoterapia. Todas ellas trabajan con el Qi, el “chi”, que corresponde a la energía que moviliza y da vida al cuerpo y a todo lo que nos rodea.
Así lo explica a Página 7 Valentina Mayorga, licenciada en Salud Integrativa y especialista en medicina china. “Si en mi entorno hay una energía perversa, un virus que está rondando y pone en peligro mi bienestar, yo como terapeuta puedo aplicar estas terapias para ordenar el flujo de energía en la persona, buscando generar una energía sana que sea capaz de cuidarme y hacer que funcionen bien todos los sistemas“, dice.
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Además señala que, al realizar esta prevención, se elimina el estancamiento energético, y “evitamos que esa persona tenga un ambiente propicio para que algún virus altere su salud, es decir, fortalecemos su Qi”.
Quien también realiza hoy en día este tipo de terapias es el actor Santiago Tupper, recordado por sus papeles en exitosas teleseries como Vuelve Temprano y Verdades Ocultas, donde interpretó a Alonso, uno de los enamorados de Rocío.
Según explicó en una publicación en Instagram, “no hay manera de resumir lo que hace la acupuntura. Tendríamos que hablar de los tipos de Qi, Yin/Yang, 5 elementos, frío/calor, emociones, sangre y muchos otros conceptos que ni siquiera tienen traducción al español. En términos muy generales, la acupuntura trabaja sobre la circulación y usa las agujas para acceder a los meridianos y provocar una reacción que restablezca el flujo interno armónico“.
Beneficios y ventajas
Cuando estudiaba, el intérprete nacional -cuyo último proyecto más difundido fue la obra musical Y un día Nico se fue– hizo su práctica en el Hospital San José, donde atendía pacientes durante 25 minutos aproximadamente. Así lo reveló a Las Últimas Noticias el año 2017. En esa oportunidad también destacó que la ventaja de una consulta privada es que puede extenderse hasta cerca de una hora, lo que le permite profundizar en las características y dolencias de la persona.
“La mayoría sabemos de la existencia de la acupuntura por su eficacia en tratar dolores musculoesqueléticos. Sin embargo, esta tiene un alcance muchísimo mayor en cuanto a sus beneficios. Son cada vez más los pacientes que se someten a esta terapia y han tenido resultados positivos en tratar insomnio, depresión, trastornos digestivos, desórdenes menstruales, infertilidad, alergias y una larga lista de síndromes”, detalló el terapeuta, quien atiende actualmente en su consulta privada en Maitencillo, tomando todas las medidas sanitarias.
Valentina Mayorga complementa esto explicando que el Qi también se observa en el plano emocional, que se ha visto tremendamente afectado por la pandemia y el encierro. “Han llegado a mi consulta personas con problemas de ansiedad, problemas para dormir, con hábitos nocivos, personas que están en duelo, que han perdido sus trabajos y tienen mucha angustia… tantas cosas que se han manifestado este tiempo, y han encontrado alivio en estas medicinas, porque el actuar es desde el propio flujo, desde la propia capacidad del cuerpo de sanar“, aseguró.
Esto se debe a que cada atención es totalmente personalizada, pues se intenta restablecer el estado de salud individual de cada paciente. Cada uno es único.
Fortalecer el organismo
Otra opción de tratamiento son las ventosas, que según Santiago Tupper se han vuelto cada vez más populares.
“Es una técnica sencilla y muy útil para combatir dolores y contracturas. En palabras simples, la ventosa lleva sangre a nutrir aquellos tejidos que puedan estar dañados o contraídos. Además, ayuda a ‘despegar’ la fascia de la piel y permite mejor irrigación en la zona, aportando a la regeneración celular”, apuntó en otra publicación de Instagram.
Esta práctica alternativa, sumada a otras de la medicina tradicional china, aportan relajación desde el alivio de dolencias, muchas de las cuales se han visto incrementadas por el estrés y ansiedad que producen la pandemia y el confinamiento.
“Emocionalmente estamos muy desgastados. Esto se expresa muy claramente en nuestros estados de ánimo y por supuesto en el cuerpo a través de dolores o desarmonías orgánicas. La acupuntura es una muy buena alternativa para equilibrarnos física y mentalmente gracias a la reposición del libre flujo del Qi (energía) y Xue (Sangre)”, agregó el actor.
“Comparativamente las medicinas alternativas pueden ser bastante efectivas desde el plano de la prevención y tratamiento de la enfermedad, porque lo hacen desde el fortalecimiento de las capacidades innatas del organismo, tanto a nivel físico, emocional y espiritual“, concluyó la experta.
Qué pasa con la actuación
Santiago Tupper cursó sus estudios en la Escuela Internacional de Medicina Tradicional China, entre 2015 y 2018. Ese mismo año rindió su examen para certificarse en el Ministerio de Salud.
“Cuando puse mi atención en la medicina china me di cuenta de que era una muy buena combinación entre mi interés por las filosofías orientales y la posibilidad de hacer algo que fuera útil para otras personas“, reveló a Página 7.
Añadió también que hacía muchos años sentía la deuda de estudiar algo más, aparte de actuación. “Siempre he sido inquieto en cuanto al aprendizaje y nunca he proyectado mi vida haciendo solo una cosa”, precisó.
En la entrevista, dejó en claro que no decidió dejar de actuar por completo, pero sí hubo aspectos de ese mundo que le hicieron mucho ruido.
“La exposición, la competencia, el lobby, la inestabilidad. Esa sensación de que como artista todo es cuesta arriba. Esa sensación de que nos estuvieran haciendo un favor por llamarnos para trabajar, o de creer que estás en la cima y descubrir que era todo una ilusión, una fantasía que va y viene… Me resultaba agotador”, sinceró.
Por ese lado, aseguró que a veces se encuentra mucho más emocionado por un paciente que se sana con ayuda de sus terapias, que con la foto que le pedían en la calle cuando lo reconocían por personajes como el malvado Hans Troncoso (Vuelve temprano) y Alonso Toledo (Verdades Ocultas).
En todo caso, no desconoce que el ser rostro de teleseries le abrió puertas a la hora de enfrentar otros desafíos. “Agradezco la interacción fácil que se da con la gente cuando me reconocen. Lo que más me gusta de eso es cuando me hacen notar con impresión que soy una persona normal, no esa especie de ‘ser superior’ que te da el estatus de ‘famoso’“, concluyó.
