Los juanetes son una de las dolencias más consultadas al podólogo. Esta deformación del dedo gordo del pie -o del pequeño, llamado “juanete de sastre“-, provoca inflamación y dolor al caminar.
Esta patología molesta y antiestética, es común en mujeres, y pueden aparecer por “herencia” desde la infancia o por una deformación paulatina debido a los malos hábitos al caminar: mala postura del pie o uso inadecuado de calzado. También los puede provocar enfermedades metabólicas como la artritis reumatoide.
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“Si la causa es genética no podemos impedir que salgan, pero si es adquirida, podemos prevenirlos con unos zapatos adecuados, y si fuera preciso, con unas plantillas para mejorar la dinámica del pie“, explicó el Dr. Daniel Mayral, de la Unidad de Podología Adrio Clínic de Barcelona, a Saber Vivir.
Es que los zapatos de tacón alto, demasiado ajustados o puntiagudos, son uno de los principales causantes de esta molestia. Según el Mayral, “la horma y la altura de muchos zapatos van en contra de la morfología del pie“.
Síntomas de aparición de juanetes
Según indicó el especialista, hay varias señales que nos deberían alertar sobre la aparición de juanetes:
- Se empieza a ver un bulto que sale en la parte exterior de la base del dedo gordo del pie.
- Hay hinchazón, inflamación o enrojecimiento alrededor de la articulación de dicho dedo.
- Antes de formarse puedes sentir dolor y enrojecimiento en la zona. Un dolor que puede ser intermitente o persistente.
- Si la deformidad hizo que otros dedos del pie se sobrepongan.
- Se te hace complicado ponerse zapatos.
- No solo sientes dolor en la zona, también te duelen cadera, espalda, rodillas u otras partes del pie, pues al pisar mal se tiende a sobrecargar otras zonas del cuerpo.
Recomendaciones y operación
Para el podólogo, lo primero es consultar y ver cómo es la pisada de la persona, con ese diagnóstico se podrá elegir el tratamiento más adecuado, en el caso de necesitar antiinflamatorios, infiltraciones, sesiones de rehabilitación, laserterapia; y si el dolor no se atenúa, recurrir a una cirugía.
Además, indicó que las vendas o parches no corrigen ni eliminan los juanetes, aunque sí calman el dolor en la zona producida por la presión de los zapatos y corrigen la postura. Pues algo que hay que tener en claro, es que una vez que aparecen los juanetes, la única forma de eliminar la deformidad es con una operación.
Por esa razón, aconsejó cambiar el calzado ni ocupar uno que no apriete el pie no oprima los dedos. Lo ideal es un zapato con tacón medio, que no sea muy alto y tampoco plano.
¿Operarse? El Dr. Mayral recomendó realizarla cuando la patología se vuelve muy dolorosa y genera incapacidad para caminar y ponerse zapatos, y aseguró que con las nuevas tecnologías, es casi imposible que vuelvan a aparecer.
