Que el mundo necesita un respiro del plástico es un hecho, por lo que cada vez más las marcas comienzan a optar por la venta de productos más sustentables para el medio ambiente.

De esta forma apareció la alternativa de champú sólidos en el área cosmética, sin embargo no siempre sus componentes cumplen con el requerimiento de ser amigables con nuestro entorno, y tampoco logran los mismos resultados en nuestro cabello.

Por lo anterior, el farmaceútico de Laboratorio Phergal, Diego Hoyos Plaza, explicó a Vanitatis la serie de elementos que no debería contener este tipo de producto para que cumpla su función y no genere un daño a nuestro cuero cabelludo, tales como: agentes de limpieza como SLS (detergente y espumante) o SLES (tensioactivo y humectante y emulsionante), ingredientes potencialmente irritantes como el cloruro sódico, utilizado habitualmente para espesar, reseca cabello y cuero cabelludo y/o lo deshidrata.

A su vez, el especialista asume que uno de los grandes beneficios de los champú sólidos es la cantidad de lavados que rinde, ya que es superior a aquel que compramos en un envase plástico, por lo que debemos revisar si este está cuantificado al comprarlo.

También, recomienda realizar un chequeo de la base dermatológica del producto, para así cerciorarse que este cumpla la función hidratante.

¿Y la sustentabilidad?

“Sobre todo se debe tener en cuenta la certificación natural”, explicó el farmacéutico, quien sostuvo que se debe tener mucho cuidado al comprar el champú, puesto que muchos aseguran tener componentes naturales, pero en realidad poseen alta cantidad de químicos.