Sin duda, uno de los mayores temores de quienes tienen mascotas dentro de la casa es que rompan las muebles, lo que probablemente causará más de un dolor de cabeza.

Pero no todo está perdido, ya que existen una serie de trucos para que tu perro evite realizar este tipo de prácticas, y sabemos que este consejo puede que haya llegado un poco tarde, pero aún se puede entrenar a tu mascota para que no lo haga más.

De acuerdo a lo informado por el medio Consumer, con los juguetes apropiados y unos trucos de profesionales, esto se puede resolver. De hecho, según afirma el etólogo veterinario Dani Ferreiro, son cuatro los tips que puedes emplear.

Cuidado con lo que come tu perro

La comida seca que ingiere tu mascota muchas veces no necesita ser mordida, por lo que rara vez puede que sacie su hambre. Por ello, el especialista asegura que se debe evaluar un cambio en su alimentación, pero no cambiar su comida, sino que buscar algún elemento que lo complemente y fomente el mordisqueo.

¿Qué puede morder?

“A veces sencillamente hemos olvidado contarle al animal qué puede roer y qué no, por lo que no debe extrañarnos que sus mordisqueos acaben en el sofá”, explicó.

Para ello, es recomendable ir enseñando qué puede morder y qué no, lo que se puede aplicar comprando elementos mordedores apropiados para el can.

“Lo normal es encontrar juguetes como pelotas y accesorios con cuerdas resistentes para practicar el tira y afloja, pero rara vez hallo juguetes mordedores apropiados en casa”, lamentó Ferreiro.

Por lo anterior, el veterinario recomienda que adquieras un kong, un accesorio de goma resistente que puede encontrarse en diferentes tamaños y en el que puedes introducir comida dentro, lo que lo mantendrá entretenido por varias horas.

Adiós a los repelentes

De seguro adquiriste ese producto en la tienda que promete que tu perro jamás se acercará a los muebles, y claramente no resultó, pero el experto advierte que sí podría traer efectos adversos.

“El perro aprenderá que cuando huele dicho producto resulta mejor no acercarse al mueble, pero el aroma se irá evaporando y desaparecerá y, entonces, tu mascota estará deseando volver al mueble para morderlo”, alertó.

La alternativa reside en usar la educación en positivo y mostrarle qué juguetes sí puede morder con total tranquilidad.

Comida fría

Las cosas congeladas son un gran aliado para los perros, ya que se califica como un placer para estos sobre todo en verano.

Para ello, Ferreiro recomienda que empapes alguno de sus juguetes en caldo de pollo -sin cebolla, ajo ni otros alimentos peligrosos para tu mascota-, y luego lo introduzcas en un tapper con comida que le entregará crocancia.

Posteriormente, llévalo al congelador un par de horas y estará listo el helado para tu perro que mordisqueará durante horas, y evitará que lo haga con tus muebles.

¿Y los cachorros?

“Los cachorros tienen la conducta exploratoria aún más potenciada, porque están descubriendo el mundo”, aclaró el etólogo.

Es que incluso en estos pequeños hay un factor que no tienen los perros adultos, las molestias y el dolor de la aparición de los dientes, el cual disminuyen mordiendo.

Tomando en cuenta lo señalado, la idea es generar que el can cuente con su espacio propio, tal como lo harías con un recién nacido. “Igual que no dejaríamos a un bebé de cinco meses solo en casa, tampoco deberíamos desatender a un cachorro y dejarle en casa con todos los muebles y peligros a su alcance sin supervisión”, advirtió.