Joanna Czech es una experta en piel radicada en Estados Unidos, quien lleva más de 35 años tratando el rostro de diversas celebridades, entre ellas Christy Turlington Burn y Jennifer Aniston.

Por ello, compartió con la revista Vogue tres consejos de belleza, fáciles y prácticos para conseguir una piel radiante… ¡y desde casa!

1. Masajes faciales

De acuerdo a la especialista la parte más importante de cualquier tratamiento facial es la técnica de masaje, por lo que hay que manipular los músculos faciales como si fueran una masa.

Así se estimula la circulación sanguínea. La sangre lleva oxígeno a la piel, iluminándola al instante, a la vez que se genera una microinflamación en el músculo que calienta la piel y permite penetrar más fácilmente todo lo que se aplique después”, explica.

Pero ojo, el masaje no debe iniciar en nuestro rostro. Czech aconseja comenzar estirando la parte frontal del pecho, de hombro a hombro, y masajeando después a ambos lados de la columna, extendiendo el movimiento hacia abajo. Incluso, señala la experta, sus masajes comienzan desde la cintura.

Todos los nervios responsables de la parte frontal del cuerpo están situados a lo largo de la médula espinal, por lo que es lo que primero debemos masajear. Con ello preparamos el rostro y los efectos del masaje que demos después mejorarán mucho“, señala.

Posteriormente, recomienda utilizar un masajeador facial desde el centro del rostro hacia los bordes, terminando en los ganglios linfáticos que hay en las sienes y detrás de las orejas. Esto ayudará a desinflamar, reafirmar e iluminar.

Ve siempre en la misma dirección, en lugar de retroceder y avanzar”, acota.

2. No te enfoques solo en el rostro

Czech tiene un lema: para lucir buena cara “hay que empezar por los pezones y terminar por la línea del cabello”, en todas tus rutinas de belleza, desde la matinal hasta la nocturna. Aplicar limpiador e hidratación en esta zona es fundamental, incluso mucho más que en el rostro mismo.

Es muy importante cuidar también el escote porque esta zona muestra signos de envejecimiento antes que el rostro en el 70-80 por ciento de los casos”, sostiene.

3. La piel es una esponja

“Piensa que tu piel es como una esponja. Si observamos la piel al microscopio, vemos que debajo hay tejido graso, fibras de colágeno y otras cuantas capas… como si fuera una esponja”, asegura la profesional.

Por eso siempre aplico movimientos de presionar y soltar (suavemente), para que el producto penetre mejor en la piel”, agrega, de modo que la piel se abra, atrape y absorba el producto.

“Hecho esto, haz lo mismo con otra capa más de producto”, finaliza.