Junto con el sentimiento de culpa o cargo de conciencia, muchas son las personas que comienzan a ejercitarse después de las Fiestas Patrias.

Milagros es lo que esperan algunos después que comieron y bebieron como si no hubiera un mañana, jurando de “guata” que conseguirán bajar de peso igual de rápido que como subieron. El añorado “verano sin polera” se convierte en la prioridad para muchos que vienen de un invierno donde no se restringieron ni un poquito.

En atención a esta necesidad, cabe destacar que iniciar o retomar la actividad física después de este festivo periodo, por lo general causa agotamiento y dolores musculares. Además, si no se tienen las precauciones adecuadas, está la posibilidad de sufrir lesiones como desgarros o contracturas.

“Para las personas que tienen un estado de salud normal, lo más importante (…) es realizarse una evaluación física general. En esta se debe examinar tanto la parte fisiológica, por parte del médico, a través de exámenes físicos y de laboratorio, como también del área física, donde kinesiólogos o profesores de educación física puedan programarle el tipo de actividad que puede realizar”, señaló el kinesiólogo de Vidaintegra, Eugenio Zúñiga.

En el caso de las personas que empiezan a hacer ejercicio después de un largo tiempo sin actividad, se recomienda realizar deporte durante unas tres veces por semana, durante una hora aproximadamente, e ir viendo cómo se da el proceso de adaptación, que según el especialista toma tres semanas.

“El ejercicio es como un medicamento, tiene indicaciones, contraindicaciones, dosis y no es igual para todo el mundo, ya que el ejercicio mal indicado o mal realizado puede generar problemas”, sentencia.

Es por lo anterior que Zúñiga entregó una serie de indicaciones a tomar en cuenta antes de comenzar alguna rutina de ejercicios.

Entrenamiento

1.- Si tienes alguna patología crónica como hipertensión, problemas coronarios, deficiencia renal o diabetes, debes consultar con un especialista alguna rutina que no afecte tu salud.

2.- Haz un calentamiento de 20 minutos que incluya elongación y ejercicios cardiovasculares.

3.- Comienza con cargas livianas que no superen el 60% de tu capacidad máxima.

4.- Mantén la respiración en niveles normales, evitando agitarte demasiado. No aguantes la respiración mientras levantas pesas o haces los ejercicios. La respiración siempre debe ser fluida.

5.- Hidrátate antes, durante y después del ejercicio.

6.- Elonga por lo menos 15 minutos después del entrenamiento.

7.- Trata de mantener una frecuencia constante de entrenamiento. Lo ideal es tres veces por semana.